domingo, 29 de abril de 2018

Rafael Andolz




Señoras y Señores: Yo no bebo alcohol y sin estar chispa, veo chispas por todas partes; no estoy ante un hogar donde la leña chisporrotea y sigo viendo chispas por todos los lugares. No se ofendan porque, teniéndoles a ustedes delante de mí, pudieran tomarlo al pie de la letra y no tengo que recurrir al truco de taparme los ojos, como aquel que tapándoselos, le decía a la novia, delante de un enorme finca: todo lo que veo es mío. Así no mentía físicamente, pero moralmente sí porque a la hembra placentera, con el cebo del enorme campo, lo que pretendía era llevársela a su pobre huerto. Alguno de ustedes  puede pensar, ¿a qué huerto nos quiere llevar este tío?.Simplemente voy a tratar de explicarme a mí mismo, porque se dice que el humor tiene chispa.
Las chispas se producen por el roce, por el choque de dos cuerpos. Cuando las mulas, con sus herraduras, golpean el suelo pedregoso, saltan chispas, cuando nuestros antiguos golpeaban dos pedernales o petreñas” soltaban “purnas” o chispas sobre la yesca o el “lastón” seco y provocaban  fuego. Yo no las he visto, pero dicen que también saltan cuando los hombres riñen y se insultan. Y es que las chispas al producirse, engendran algo, bueno o malo: en los coches, combustión de la gasolina, en los mecheros la chispa, fuego para encender el cigarrillo; todo esto es bueno, pero en ocasiones ya saben que “parva scintilla mágnum excitavit  incendium”, una pequeña chispa provocó un gran incendio.
Igual pasa con la chispa del humor, unas veces provoca el buen humor y otras como la de Gurruchaga provoca un gran incendio de mal humor, entre unos y de bueno entre otros.
Una chispa en unos casos enciende un placentero cigarro y en otros un incendio. Pero para que haya humor tiene que saltar la chispa del humor. Si no hay chispa no funciona, como le pasó al alcalde de Albero, que estaba frente al Correos, dale que te pego al pedal de la moto y no se ponía en marcha. Al preguntarle un guasón que le pasaba a la moto, le contestó el de Albero: ”¡Que ha de pasar, que no espurnia!”.
En el humor salta la chispa del roce o contraste entre lo serio y lo ridículo y el buen observador verá saltar la chispa, simplemente, mirando el contraste, en la vida, entre el sentido común y el discurrir de ella, tantas veces irracional, absurdo y ridículo. Una de las definiciones del humor, dicen que, consiste en presentar de un modo serio a alguien o a algo ridículo, como hacía aquel sacristán que de una mujer pintarrajeada, superacicalada  y súper atractiva vestida con ropas que pretendían ser originales, cuando en realidad parecía un espantapájaros, decía.”Parece  una madama!. Presentar con humor a Rafael Andolz, resulta difícil, por no decir imposible porque si de un personaje serio se dicen cosas serias, nos quedaremos en la seriedad, jamás entraremos en el humor. Sin embargo, si observamos su rostro moreno con esos ojos atónitos, nos recordará a la lechuza, que además de ser el ave de la sabiduría, se fija mucho. Ese fijarse, aparentemente ridículo de la lechuza, lo cambiamos por esos ojos escrutadores de Rafael, tan serio y habremos hecho humor. Espero que el aludido que escribe sobre el humor aragonés, lo tome en tal sentido, teniendo en cuenta como atenuante de mi afirmación que Unamuno fue caricaturizado como una lechuza.
Si, Rafael cree en el humor, si no, no hubiera escrito este libro, en cambio Unamuno quizá con su sentimiento y resentimiento trágico de la vida dijo: ”Eso que se llama por ahí humorismo, el legítimo ni ha prendido en España apenas, ni es fácil que en ella prenda”.
Yo creo que tienen razón los dos. Rafael recoge, no exclusivamente porque es imposible, anécdotas humorísticas, que pocas veces son finas, porque un pueblo pobre, inculto, oprimido al que tan bien ha pintado Goya (véase el humor negro) es difícil que se exprese con finezas y zalemas, pero el humor ha prendido y debemos trabajar para que se desarrolle de un modo más fino y no grosero o pasota.
Hay que investigar en nuestro humor aragonés. Aquí, en este libro tenemos datos, pero no olvidemos que, dentro de nuestra condición humana no podemos olvidarnos de esos humores sanguíneos, atrabiliarios, biliares, linfáticos y porque no decirlo, marrones, que son comunes a todos los hombres y no-propiedad exclusiva de los aragoneses.
La lechuza se fija mucho, pero no habla y menos escribe. Rafael habla poco, pero después de fijarse, no para de escribir. Y ese fijarse le lleva a hacer que también los demás se fijen. Hace poco, acompañado de un amigo vasco, me preguntó que desde dónde se podría observar una buena perspectiva de la Sierra de Guara; es indudable que él había visto y conocía la Sierra (humor aragonés: preguntar lo que se ve) y la había mostrado a los muchachos que acompañaba, para que la amaran, pero quería que el vasco se fijara en nuestra Sierra de Guara. En este tema se le adelantó evidentemente Pierre Minvielle, pero porque nació antes, sin embargo en nuestra fabla, en la que era difícil de fijarse con los ojos, él se fijó con los oídos y la plasmó en el mayor diccionario que sobre ella existe, para que nos entrara por los ojos. La lechuza no tiene orejas y Rafael sí; en cambio la lechuza tiene alas y Rafael no, pero las sustituye con piernas, que lo han llevado a los rincones más recónditos de nuestra bendita tierra y lo han aproximado a escuchar las voces de hombres y mujeres que nunca  habían sido escuchadas hasta que él llegó a hacerlo. Pero también ha recorrido las parideras por donde no había pasado nunca ni Nuestro Señor, para enterarse de las venturas y desventuras del Cucaracha, bandolero que por ser aragonés era más generoso y justiciero que los andaluces y éstos han salido en novelas y películas y el nuestro, nada de nada hasta que nuestro hombre publicó el libro de su vida.            .
Es difícil, a veces, para la gente aragonesa distinguir lo serio de lo que puede ser objeto de humor, porque es capaz de ridiculizar todo,  incluida  nuestra fabla, a la que Rafael tomó en serio con su diccionario.
¡Cuántos aragoneses cultos han sido unos somardas  con los aragoneses que conservaban su lengua!.Algo de eso pasó, pero mucho más mitigado, en Cataluña y en el  País Vasco, pero allí eran forasteros los socarrones!.El socarrón adoptando una actitud seria, ridiculiza a los demás; entre nosotros, el somarda, palabra nuestra, lo hace con más crueldad. (El regreso de Edelmiro, de  Sender)
Efectivamente nuestro somarda ataca, satiriza, descalifica con humor duro a aquel que pone de manifiesto grandes defectos. A aquel que no deja en paz a las mujeres lo llaman buco o bucardo, según su grado de salacidad.
Cuando alguno, por interés, se casa con una mujer manifiestamente disoluta, le dicen que tendrá que “desanchar” a puerta. Si uno es avariento, dicen de él que no come por no  chagar  o evacuar. Si alguien quiere quedar bien con los forasteros y los lleva a casa ajena, le achacan de quedar bien con lo de “otri”.
Cuando se trata de un vanidoso que presume de algo que supera sus posibilidades, exclaman: ”¡De qué le viene a o tocino, llevar a coda tiesa!”. Nos hemos topado con las mazadas, de las que Rafael habla. Bien aplicadas dan un humor rotundo como el golpe de una maza o mallo. Esta sátira, no se limita a los individuos, sino que se extiende a los partidos políticos, a los pueblos o a las entidades que piden y piden. Los legos de los conventos y algún vecino pedían paja, por amor a Dios o por buena vecindad y si les decían que sí, la prensaban en mandiles enormes, tanto que el labrador le dijo al gorrón: ya habrás robau o mandil en un circo, refiriéndose  al toldo que los cubre.
A veces esa sátira es cantada en forma de jota, como cuando los de mi pueblo quisieron regar sus campos. Se pusieron de acuerdo par levantar una presa en el río, cerca de Arbaniés. Les facilitaría la tarea el derribar una roca sobre el cauce y como ya es clásico en nuestra tierra, ataron a ella una soga y se pusieron a tirar, hasta que se dieron la correspondiente culada, como recoge Andolz en  Almudévar.
Fracasó el proyecto y desde entonces cantan y dicen: ”Los señores de Siétamo, pusieron el monte en huerta y “pa “ la Virgen de Nunca, pasa el agua por la acequia”. Para redondear la sátira, añadían como estribillo”: “Ay, que me mojo” y de ahí que a los de Siétamo, nos llamen “Memojos”. Gran número de apodos cita Rafael Andolz en su libro y cada uno de ellos es una píldora que si se abre, nos pone al descubierto una pequeña historia cómica o tragicómica.
La extensión del libro no ha permitido a su autor entrar en un análisis profundo del humor de nuestros paisanos, pero nos ha plasmado un anecdotario popular, en el que el investigador encontrará material abundante para su estudio.
Ya en el marqués de Santillana  encontramos una poesía en que a los aragoneses nos asimilaba a los navarros y nos trataba un poco de fachendosos o faroleros. También dijo alguien, que ahora no recuerdo que éramos muy amigos de los escudos y de enseñarlos.
Tal vez sean un poco faroles, pero más amigos de apagarlos. (Os daré un pollo si me pone  una falcada bien grande. ¡Qué mañosos, “miá” que meter toda la cosecha en una falcada!.
Otra característica nuestra es un gran sentido de la justicia, pero hasta de ella hace burla Pedro Saputo con su cuento ”La justicia de Almudévar”.
Hemos tenido grandes satíricos, empezando por Marcial, siguiendo por Gracián  y Braulio Foz, hasta López Allué, pero hemos cultivado poco la comedia de los clásicos, que tenía la misma finalidad que nuestra sátira:  combatir  los vicios.
De los relatos de Andolz aquellos clásicos hubieran creado grandes comedias.
De los creadores de buen humor, en los tiempos arcaicos, acuden a mi memoria los nombres de Cristófanes y Menandro, entre los griegos y de Plauto y Terencio, entre los romanos.
Se pasa la vida el que ha estudiado de memoria, recordando esos nombres que suenan bien, pero de cuyo ingenio no puede gozar, porque no ha leído nada de ellos y se ríe con el ingenio de Tip y Coll y con el de Mª Carmen y Doña Rogelia. Pero yo he tenido la suerte de que cayera en mis manos la obra de Plauto: ”La comedia de la olla”,y resulta que esta obra que se representó antes de Cristo ha seguido representándose en nuestros pueblos desde entonces y ahora, que ya la creíamos periclitada, ha vuelto a resurgir con nuevos bríos, desde que el Señor Miterrand llegó al poder en Francia. Me lo contó un francés, diciéndome que  el dinero  se había  hecho  amigo, nuevamente de los calcetines, los colchones, los ladrillos y las ollas. En España ocurre lo mismo, aunque es difícil de saberlo porque de la misma forma que el viejo Euclión no hablaba con nadie de su olla, tampoco nuestros contemporáneos dicen nada de sus escondites y de sus olletas.
¡Cuántas veces la comedia de Plauto, con su humor, se ha repetido en nuestros pueblos!. Todos ustedes habrán oído contar algún caso.
Rafael Andolz nos ha presentado un libro que contiene una larga, no podemos llamarla bibliografía, pero sí populoauditoría de chispas de humor, que nos hacen ver que ese humor aragonés está entre nosotros, pero es una invitación ante la crisis del humor (negada por algunos) a cultivarlo y a desarrollarlo.



miércoles, 25 de abril de 2018

Manolín Abad, se entrega al Gobierno en Casa Almudévar de Siétamo





Manolín Abad o Abbad, nació entre 1815 y 1.818 en Huesca y  llegó a dirigir  a un grupo de rebeldes combatientes republicanos aragoneses, a los que se conocía por Partida de las Cinco Cinco Villas.
Junto a la Ermita, a la que ahora han dado un aspecto más cuidado en el Tozal de las Mártires, donde se alza dicha Ermita y donde cada año se celebran actos litúrgicos, que recuerdan a las Mártires Nunila y Alodia. Hay un recuerdo ferviente y cariñoso de esas dos mártires, hijas de un jefe moro, cuyas dos figuras están representadas sobre el Pórtico de la Ermita y reproducidas en las paredes de la escalera, que asciende a lo alto del antiquísimo Monasterio de Alquézar, lo que pone a Huesca y a Alquézar como partes, donde se desarrolló la santa vida de estas Mártires.
Anexo a la Ermita se halla el medio olvidado  cementerio  de  Huesca, donde se llevaron a cabo las humillaciones y asesinatos de hombres y mujeres.  Unos eran grandes dirigentes, otros presidentes, otros demócratas y algunos fascistas absolutos. La evolución del pensamiento de los hombres, ha caminado por distintos caminos, unos seguían  a  los  enemigos,  como  los  cristianos,  que  en  muchas ocasiones, en lugar  de  mostrar  sus cruces en son de Paz, luchaban con sus espadas. Los musulmanes  en Jerusalén luchaban y sometían a todos los cristianos y ahora, en el siglo XX, los judíos recobran el dominio de gran parte de Palestina.
El Señor ha dado la libertad de pensamiento a los hombres, pero éstos no aceptan más que sus teorías particulares y las conciencias de los ciudadanos obedecen a las teorías de sus pensamientos y de sus pensadores. Es difícil unificar un espíritu de Paz entre los hombres. Y se siguieron llevando a cabo las vejaciones y asesinatos de hombres y mujeres antifascistas en unos lugares y de fascistas en otros lugares o en los mismos.
 Y allí, en medio del cementerio, testigo por sí mismo de la barbarie de la guerra, frente a la ladera que mira al Norte, se levanta un monolito, que erigieron en 1885, que nos recuerda a Manolín Abad, soñador de una República  justa y de los defensores de la I República española, y fusilados en 1848.    
Manolín, el oscense, soñaba con un gobierno justo y organizó una Revolución Oscense, para implantar en España un Gobierno Republicano.  Parece que el rebelde Manolín soñaba con una Justicia, que gobernara en España, pero como son tantas las justicias que sueñan muchos hombres,  cada uno según su forma de pensar, otros soñaban con perfeccionar las mentes, unas veces totalitarias y otras dictatoriales, y de esa variedad de pensamientos, surgían aquellas guerras civiles, que traían la muerte a muchos idealistas, como lo era Manolín.
Los hombres recitaban el Padre Nuestro, diciendo: ”Padre  Nuestro que estás en los Cielos….. Hágase tu Voluntad, así en la Tierra como en el Cielo”. Pero luego lo que buscaban era su propia voluntad y parece que coincidían en pedirle “El Pan nuestro de cada día, dánosle hoy”, pero lo que el hombre ha hecho desde la prehistoria hasta la actualidad, ha sido buscar el pan nuestro de cada día para unos y dejar a los otros sin ese pan.  La Voluntad de Dios creó al hombre Libre, pero esa libertad no ha buscado la Libertad de la Humanidad, sino la libertad de los hombres que se sintieron libres por sí mismos y a través de sus Dirigentes.
El Señor quiere que el hombre sea libre y que busque el cumplimiento de esa libertad y el bien de todos los hombres. Pero el hombre hace sus guerras libremente y convierte a la humanidad a través de los siglos, en unas continuadas guerras entre los humanos.
Esta guerra por crear en España una República en los años de 1873 y 1874, desde el día 11 de II de 1873, hasta el 29 de Diciembre de 1874, que dicen se proclamó por la abdicación del Rey Amadeo de Saboya. Manolín fue fusilado el 5 de Noviembre en las  Eras de  Cascaro, al fin de la calle del  Desengaño. Tuvo lugar este fusilamiento 82 años antes del sacrificio de Gabriel y Galán.
Junto  a  la  Ermita a veces un tanto descuidada, que se levantó hace siglos, en el Tozal de Las Mártires, se encuentra el cementerio viejo de Huesca, donde se realizaron las vejaciones y asesinatos de hombres y de mujeres oscenses , unos fascistas y otros antifascistas. Y al entrar en el cementerio, en su ladera del Norte, se alza un  Monolito, que levantaron el año de 1885, como un homenaje de recuerdo a Manolín Abad y a algunos de sus compañeros, defensores de la I República, fundada en 1848.
Manolín Abad era un oscense, nacido entre 1815 y 1818 en HUESCA y fue el líder  de  un  grupo   de  luchadores aragoneses republicanos.  A su grupo lo llamaron luchadores republicanos aragoneses, que se dieron a conocer como Partida de Cinco Villas, que se levantó contra la Monarquía. El día 26 de Octubre de 1848.  Se  levantaron  contra dicha Monarquía y asaltaron el citado  Cuartel y se apoderaron de dinero, armas y caballerías. Sin  producir  víctimas,  emprendieron una marcha, sin posible retorno. Tomaron el camino de Huesca por Rivas, Luna, Bolea y Ayerbe. Llegaron a Huesca el día 30 de Octubre, perseguidos por las Tropas del  Rey.  En Huesca liberaron a los presos políticos y se desplazaron a SIETAMO y en esta Villa, seleccionaron el Castillo del Conde de Aranda, entonces propiedad de la  familia   Almudévar  de SIETAMO.
Se atrincheraron en el hoy arruinado Castillo- Palacio  y  acabaron tratando su rendición, pero esas condiciones de  rendición fueron  traicionadas,  antes de firmarlas  por los representantes de Isabel II.
Detenidos los integrantes de la tropa republicana, los trasladaron a Huesca.
Pero mi padre me contaba los hechos ocurridos entre Manolín Abad, originado en una casa infanzona, de la parte oriental de la provincia de Huesca y los infanzones de  Casa Almudévar de Siétamo. Se habían refugiado los republicanos en el Castillo-Palacio del Conde de Aranda, entonces propiedad de Casa Almudévar y el General Anglés decidió que no iba a cumplir lo pactado con los republicanos, que permanecían en el Castillo de Siétamo. Manolín se refugió en Casa Almudévar, que eran Infanzones y mi bisabuela, le aconsejó  que  por la puerta falsa, que se abre por el Campo de Valdecán, huyera al campo libre. Pero Manolín no quiso abandonar a los numerosos soldados que le habían seguido. Pero “llegando a Siétamo buscando el asilo foral de la noble Casa Infanzona, de los Almudévar, cuya señora le aconsejó que huyera por el Valdecán”. No quiso Manolín traicionar a sus seguidores y cuando llegó el oficial a prenderlo, mi bisabuela lo cogió del brazo y lo sacó a la Plaza, donde se lo entregó al  oficial del Ejército, diciéndole: Estamos en una casa infanzona y le pido que no lo sacrifiquen. El Oficial le contestó con mucha educación y le dijo a mi antepasada, que no se preocupara , que procurarían no hacerle ningún daño. Se habían ya terminado las ventajas que tenían los Infanzones y lo único que pudo hacer es tratar de que lo perdonaran. En Casa Almudévar eran nobles Hidalgos y Manolín Abad o Abadd, lo era también de la parte oriental de la Provincia. Aquello antiguos derechos de los infanzones o nobles sin título, ya estaban terminados.
Una vez detenidos los componentes de la tropa republicana, los trasladaron a Huesca. Manolín Abad y siete de sus lugartenientes, fuero muy pronto fusilados, el día 5 de Noviembre.  Dos días después, tras un cruel sorteo entre los republicanos detenidos, fueron fusilados otros  seis  miembros  republicanos,  destinados  entre  las tropas de Manolín. De los demás, quedaron algunos pocos en libertad. Pero la mayoría fueron embarcados en el  Puerto  de  Valencia, con destino a Filipinas.
             

lunes, 23 de abril de 2018

El ocaso en el Cerro de San Jorge de Huesca




Mi tía Luisa, Penélope  para los leñadores, era amante de observar los ruiseñores en las yedras del jardín de la Torre de Casaus  y aseguraba que,  según opinión del gran pintor Zuloaga, las puestas del sol del Cerro de San Jorge, eran las más bellas en variedad de colorido de toda España. No tengo noticia de que llegara  a conocer a tan eximio pintor; tal vez escuchara esa opinión de boca de su primo Don Manuel  Bescós Almudévar (Silvio Kosti), pintor,  además de escritor y rico en relaciones humanas de todo tipo.
De todas formas, no creo que se sacase la opinión de la manga, pues las mangas, por sí solas, constituían en aquellos tiempos una cuestión de moral conflictiva y que hacía que las pobres modistas unas veces tiraran de ellas para arriba, y otras para abajo. En aquellos tiempos, la moral se calibraba , se ponderaba escrupulosamente, y por tanto, el dejar al descubierto  unos centímetros más o menso de tejido epitelial de las extremidades superiores, constituía materia de consulta en el confesonario.
En cuanto al tejido epitelial de las extremidades  inferiores, más vale no “meneallo”,  porque mi tía, se levantaría de su tumba para amenazarme como a los leñadores que talaban los corpulentos  y copudos árboles de la carretera de Zaragoza. De esta anécdota le vino que su sobrino y primo mío José Antonio, la llamara Penélope por mal nombre; si se mete uno a redentor, sale crucificado.
¡Pobre tía Luisa, amante de la naturaleza y de la belleza visual y auditiva!. Tenía una borrachera de belleza ambiental cuando,  a la puesta del sol refulgente, se unía la frondosidad de aquellos enormes árboles y, sobre ellos, el “triunfo de los pavos reales”, que con su rueda erótica, competían en color con el ocaso. Aquellos pavos reales fueron uno a uno, aplastados  por el tráfico en aumento de los vehículos de motor; los enormes árboles, cuya tala  no pudo evitar mi tía, cayeron estruendosos, víctimas de la sierra también de motor. En cambio su prima la escritor María Cruz Bescós, consiguió que se respetase el Plátano de Indias gigante,  que todavía se alza frente a la puerta de su casa.
El ocaso sigue cada día  teniendo lugar, y seguirá mientras exista el sol, pero su colorido espectacular y cambiante se ve oscurecido  y como emborronado por el humo que vomitan las altas y negras chimeneas que por aquella zona proliferan. Me queda el consuelo que tantas veces, y en plan irónico, se aplican las gentes entre ellas: ¡ya vendrá el verano para que no se eleven esos humos negros, que velan la hermosura de nuestras puestas de sol en el Cerro de San Jorge!. Las más bellas de España.

viernes, 20 de abril de 2018

La joven mujer, leyendo un libro, apoyada en un árbol




Esta noche es Noche Buena y antes de esconderse el sol, en un corto día que busca la noche, como si tuviera deseos de que durante ella, naciera el Niño Jesús, voy paseando por delante  del  Polideportivo y me encaro, caminando, con el paseo construido sobre la vieja vía de ferrocarril.  Esta separa el campo de la ciudad y uno contempla, por su izquierda las piezas campesinas con sus trigos recientemente nacidos, con un lejano  fondo, como un telón que nos separa de las tierras que nos envían el viento cierzo y por el cielo nubes cortadas que, en parte muestran sus bellos dibujos y  por su parte azul, nos acarician, los últimos rayos del sol que está ofreciendo el día, que precede a la Noche Buena. Por la izquierda se alzan edificios modernos,  unos elevados y otros más coquetos, con su categoría de chalets.
Uno va caminando lentamente y se acuerda de aquel artículo que escribí,  hace ya tiempo,  en el que digo: ”¡ Que rueden los cielos allá arriba, en silencio casi siempre y con “ruido de ronca tempestad”, en el verano!; qué lluevan las nubes sobre el justo y sobre los niños que cantan: ¡qué llueva, qué llueva, la Virgen de la Cueva!. No parece que el salmo sea muy  piadoso, cuando pide que llueva, sólo sobre el justo. No cae la lluvia sobre los desiertos y sin embargo, no creo que sus escasos habitantes sean injustos. Tal vez lo fueran sus antepasados con respecto al árbol que talaron e hizo posible que avanzaran las dunas arenosas”.
A la orilla del paseo, con los chalets a la derecha y los campos a la izquierda, después de pasar unos viejos almendros de abundantes ramas oscuras, por no haberlos  limpiado de ellas, hace ya muchos años, apareció o más bien lo hicieron dos seres vivos unidos en el amor entre ellos, como miembros de la vida. Era un árbol de varios troncos que se extendía por el aire, brotando de la tierra y en uno de ellos se apoyaba una dulce y joven mujer, que estaba leyendo un libro de misterios de esta vida. Parecía que se amaban y se contemplaban y ella intentaba respirar el oxígeno que por sus hojas que salen en primavera.  El árbol,  ordinariamente olvidado por los paseantes, estaba callado, agradecido y en sus ramas lucía unos dibujos que parecían que eran  corazoncicos  humanos, con los que rompía el árbol su deseo de hablar con otras criaturas.
Yo, me parece que un tanto descarado por interrumpir aquella  mutua  contemplación entre dos seres que se amaban, me atreví a preguntarle que conversación mantenía entre ella y el silencioso árbol.  
Para contestarme, me dejó el libro y éste describía situaciones, en que los hombres y mujeres se tratan, pero no con maldad, sino por circunstancias de la vida moderna, en que muchos individusl, caen en situaciones violentas, que algunos jueces no se atreven a castigar como violencias voluntarias . Es igual con los hombres que caen en pecados, a los que el Niño Jesús, que nacerá esta noche, les perdona todos sus pecados.
La joven señora se consolaba con el árbol porque se había separado de su marido y su hijo le parecía que no la amaba.
Ella, que había sido discípula del sabio profesor chino, que daba sus clases de psicología humana  y vegetal en los pinos del Parque, y había consultado con su sucesor el Doctor Don Daniel Carmen, buscaba ahora, en este árbol de troncos múltiples, pero más menudos que el tronco del pino, el consuelo del mal carácter de su hijo hacia ella, pero no encontraba culpa en su comportamiento.
A mí,  como no me ha pedido consejos, le comunico las palabras de apoyo a su comportamiento vital con el árbol,  que escribí en mi artículo “El árbol y el agua”, que dicen: ”Seamos amables con el árbol que se alza en nuestros campos y plantemos nuevas vidas vegetales, que regaremos con el agua del pozo, de la fuente, de la acequia o del canal y esas umbría piadosas nos tornarán copiosa el agua de las nubes, los frutos del Otoño, sus sombras estivales y el calor de la leña en las jornadas invernales”.
¡Sigue, amiga, festejando con el árbol del Paseo, que sube al pueblo de Alerre!.  

jueves, 19 de abril de 2018

Sefarditas en Huesca




Siempre, desde niños, se nos han contado los actos malos que cometieron algunos individuos de otras religiones, como aquel, en que unos moriscos le robaron a la Virgen de Bureta, que se venera en el pueblo de  Fañanás , un retablo , con el fin de cortar en una acequia  el agua, que bajaba por ella. En aquellos tiempos en que la cultura era un bien escaso, era difícil que se entendieran cristianos, judíos y musulmanes. Mi padre Manuel Almudévar, me contaba hechos que ocurrieron en la historia, por ejemplo el de un altoaragonés, natural de un pueblo del Somontano y apellidado Palacio,que llegó a ser Diplomático y estando en El Líbano, se le acercó un joven muchacho, que vendía tortas de Ayerbe, nombre tan español como su origen en algún horno, en este caso de Ayerbe.
Era un judío sefardita ese que coincidió con Palacio de Berbegal y proveniente de Huesca. Ahora quedan pocos porque han sido perseguidos, refugiándose algunos en el estado de Israel.
En 1492, fueron expulsados los judíos de España, pero  aunque no nos hayamos dado cuenta, muchos emigraron a América, como españoles que eran, otros fueron a Portugal y muchos se convirtieron o lo simularon y la gente los llamaba conversos. La religión judaica es el origen de todas las confesiones fundadas en la Biblia, es decir el cristianismo y la religión musulmana, pero ello no impide que haya gente mala en todas las religiones, que impide su entendimiento. Pero los hombres unidos en la creencia en un Dios Ünico, debían pensar que “ Las espadas se transformarán en rejas de arado, las lanzas en podaderas, y no se enseñará ya más el arte de la Guerra”. En cambio, la gente influida por las enseñanzas que recibía, llamada “judiada”, a la acción realizada contra alguien, como por ejemplo el lucro excesivo de un dinero prestado. Quedaron muchos judíos en España y en Huesca, pues se encuentran apellidos como Salomón o Israel , que proceden  de ellos. En nuestra capital bautizaron en 1106,en la Catedral, a un gran filósofo y escritor judío, nacido en Andalucía, que se convirtió al cristianismo y pasó de llamarse Moisés Sefardí a Pedro Alfonso de Huesca.
El Alfonso lo tomó de su amigo el rey o emperador aragonés y gran oscense Alfonso el Batallador. Han pasado muchos siglos y todavía mi abuela Agustina Lafarga, me decía que en  Barrio Nuevo, antiguamente la Judería , había una Sinagoga, ya abandonada. Ahora en lugar distinto al que se creía, ha aparecido un local, en el que se trabaja haciendo fotocopias y se ven distintos capiteles, en los que se aprecian cepas de vid, con sus ramas y sus hojas. Pero en una calle que acaba en la Plaza de la  Catedral, hay una casa en la que está abierto un estanco y me enteré que en los bajos de dicha casa, ha salido otra Sinagoga. Le pregunté por ella a Jesús Benito, que era su dueño y me dijo que había capiteles y otros aditamentos sagrados para hombres talmúdicos y me prometió que me mostraría dicho local. Lo encontré otro día y se lo recordé y él, con gran generosidad me contestó que subiera al Estanco de la Catedral y se lo dijera a la dependienta. Esta, con gran amabilidad, preparó un foco de luz y me enseñó toda la  Sinagoga. A la altura de calle se encuentra un arco de herradura y una columna con un capitel que no es cristiano ni pagano, es simplemente una columna con un capitel geométrico y más adentro hay una sala con dos arcos, también de herradura y en un lado hay una pila redonda de piedra. Bajando por una escalera, colocada en un hueco de la pared  se encuentra otra pila, pero está montada con varias piedras y tal vez puesta en la entrada de la parte baja de la Sinagoga, tal vez para lavarse, como dice el salmo:”Lavaré mis manos entre los inocentes” o tal vez para depositar el Talmud, que se guardaba en lugares, como si fueran sagrarios , porque lo utilizaban para leer textos sagrados. Una vez abajo ,contempla uno varias bóvedas con arcos ojivales,es decir como si sus puntas, fuesen puntas de flecha. Hay cuatro pequeñas salas abovedadas y no se observan objetos judaicos , porque los judíos fueron expulsados en 1492,es decir hace unos cuatrocientos años.
 Jesús Benito y su esposa Isabel Pertusa están orgullosos de su sinagoga y querrían verla restaurada, próxima a la  Cristiana Catedral y a la antigua Mezquita, a la que dicen pertenecía parte de la torreta, donde están las tumbas de los hermanos Lastanosa y de mi pariente Azara. No fue ésta, la primera vez que estuve en el Estanco de la Sinagoga, sino que hacía ya muchos años, entré en él y le pedí un paquete de tabaco a la anciana madre de Jesús Benito, pero al mirar la cartera para pagarlo, no la llevaba;  entonces le dije a la buena señora : dejo aquí el tabaco y ya vengo con el dinero necesario para pagarlo, pero ella, que no me conocía, me lo hizo llevar sin pagarlo y diciendo que ya lo pagaría cuando quisiera. La sinagoga me ha hecho recordar a aquella amable persona.
Huesca es un maravilloso museo, porque al lado de San Jorge se encuentran los restos del cementerio judío y otro que al que llamaban el Fosalé en Barrio Nuevo; además se pueden ver columnas y arcos de una Sinagoga, pero en la parte alta de la Ciudad de Huesca,viejo se concentran los restos históricos, que comprenden desde los vaco-ibéricos, en el solar de los Templarios, pasando por los romanos, con el mosáico romano del Ayuntamiento, siguiendo por los árabes con sus murallas y por los judíos, que conservan todavía,sin saberlo sus descendientes, una hermosa sinagoga. Todos estos restos se encentran entre numerosos monumentos arquitectónicos  cristianos como la Catedral o San Pedro el Viejo.
Si un sefardita de los que todavía quedan en Israel, oyese la palabra Sefarad, equivalente a España y viese las fotos de las sinagogas de Huesca, sus ojos se llenarían de lágrimas, mientras nosotros estamos como olvidados de todos los monumentos, que permanecen en Huesca. 

lunes, 16 de abril de 2018

Saint-Exupéry y la Guerra Civil en España.



Se han escrito cantidad de libros, sobre la Guerra Civil Española, de la que fue corresponsal Saint- Exupéry, desde Barcelona, pues necesitaba el dinero que había perdido en 1936, por su excesivo gasto, cuando era aviador comercial. Empezó su actividad de corresponsal en Barcelona. Era un hombre que podía analizar las guerras y las paces en este mundo, porque en aquellos tiempos del año de 1936, él mismo pilotó su avión a la Barcelona revolucionaria, donde   le pareció reinar una falsa paz, un tanto tranquila. Visitó el frente de Lérida, cerca de Huesca,  pero Paris- Soir  lo mandó al frente de Madrid. Escribió unas crónicas, que publicó desde el verano de 1936 a octubre de 1938. Como acabo de decir, Antoine de Saint-Exupéry publicó las crónicas de aquella Guerra Civil, cuando ya se notaba en el ambiente europeo,  la llegada de la guerra contra Hitler.

Este hombre perteneció a la Nobleza, que ya casi no tenía sentido, pero la nobleza de su corazón, le colmó de honor. Es más conocido por su profesión de aviador y de escritor, que la hizo desde la Guerra Civil en España, continuando haciendo la Segunda Guerra Mundial,  volando en  aviones de guerra. Tenía un concepto de la aviación muy poético, en esos tiempos en que la seguridad de la vida, no era tan fuerte como ahora, lo que llenaba su espíritu de poesía. Fue aviador, pero su principal objetivo fue la facilidad para conocer el Mundo, desde Francia hasta Argelia y América, e hizo la Guerra cuando se rompió la Paz en Europa. Pero  su principal actividad en este Mundo, fue la cultura, pues incluso a la aviación le dio un tono poético, en la Guerra y en la Paz. Fue matemático, inventor, dibujante, amigo de los animales y literato que alabó la idea del hombre, alabándolo en su obra literaria “El Principito”, con la que casi se olvidó la humanidad de las notables facetas que tuvo, entre otras cosas, como periodista.

Su vida fue muy corta, porque sólo vivió cuarenta y cuatro años.

Sus crónicas de la Guerra Civil, no han sido tan conocidas  como las obras de Orwell o de Hemingway, porque su personalidad no comulgaba con ninguno de los dos bandos. No analizaba tanto como ellos,  las ideas políticas.  Saint – Exupéry dirigía sus pensamientos a gran altura, ya que era aviador antes que periodista y cuando volaba por el cielo de Europa y de Argelia se sentía místico. Con ese misticismo, al fascismo y el comunismo, los veía como dos sistemas para imponer en el Mundo, una multitud, no de hombres de espíritu, sino de multitudes de insectos, como las hormigas, que trabajan, pero que no piensan.

No le preocupaban demasiado los conflictos políticos, sino que lo que más le hacía pensar era la “misteriosa vida que el hombre vivía en su  fondo”. Le interesaba más la lucha que se mantenía dentro de sí mismo, pensando en su destino, que vivir en los conflictos políticos. Cuando volaba por las alturas, pensaba en la guerra de las multitudes, en que cada hombre está  buscando su propio destino. Cuando volaba en el avión, no pensaba en los conflictos políticos, sino subiendo hacia aquel cielo lleno de estrellas, se le planteaban los problemas que  enfrentaban a cada hombre con su propio destino. ¿Cómo Saint Exupéry   pensaba alguna teoría que le respondiese del destino del hombre?. Claro que la pensaba y llegó a tener algún principio de fe, en ella. Le atraía la doctrina anarquista, pero se desengañó de dicha doctrina, al ver como en Barcelona, le llenaron el corazón de dolor y su inteligencia de asco, al ver los fusilamientos que contempló en Barcelona.

Aquel comportamiento no respondía a teorías políticas, sino al comportamiento de seres inferiores, como las hormigas, que mataban a sus rivales, sin ninguna consideración,  que desde luego no podían hacer. En la Guerra Civil Española, cada español no luchaba contra sus enemigos, sino contra sí mismo. En el libro escrito a máquina, redactado por mi primo y que me regaló ese primo, el Cura Vallés, se ve como unos mataban a sus compañeros de doctrina. A él lo dejaron huérfano de madre y con un hermano fusilado siendo casi un niño. Esos parientes de Jesús Vallés, recogieron a su sobrino, pero se marcharon a Francia, después de hacer una guerra particular, en la que pusieron dinamita en la ciudad de Huesca. Tuvieron compasión de su sobrino, pero no les importaba la muerte que producía la dinamita. Parece  que los españoles  no luchaban contra un adversario, que viniera de fuera,  sino que brotaba de la superficie de la Nación, contra sí mismo.

Un socialista francés, se dedicaba a salvar del fusilamiento a los curas perseguidos por los anarquistas, que al principio le parecieron a Saint-Exupéry, buenos para gobernar. A un cura lo salvó el anarquista francés en la provincia de Lérida. Yo no sé si salvaría alguno en la provincia de Huesca, que se encuentra a su lado, y en la que mataron más sacerdotes que en ninguna otra provincia española. Orwell,  el escritor, uno de los mejores  que mejor dominó la pluma en el Mundo, estuvo en la entrada de la ciudad de Huesca y fue herido. Lo trasladaron a Siétamo, de donde lo llevaron a Cataluña. Yo no sé si salvaría a  algún cura de ser fusilado y está claro que bastante trabajo tuvo para salvarse  a sí mismo, pues, para salvar su vida, escapó a Francia.  Un hombre tan noble, y parece mentira se apuntó al Poum, tal vez porque en esos momentos de dificultades entraba con facilidad en esa podrida guerra. Yo creo que no salvó ninguno porque en Siétamo, donde estuvo en el Hospital, fusilaron al único sacerdote de Graus, del que no se ha tenido noticia alguna Fue fusilado en Siétamo, cerca del río Guatizalema.                

 Este año de 2017, ha venido a Huesca un familiar de Orwell y en el Museo Provincial han instalado una exposición de los sufrimientos que tuvo que pasar, para escapar con vida de nuestra triste guerra. Claro está que la inteligencia de Orwell, era superior y no podía someter  su voluntad a pertenecer a un Partido extremista, pero la locura de aquellos años,  le hizo apuntarse, para observar toda la guerra, que se estaba desarrollando en España. Para poder estar presente en aquellas batallas, se tuvo que apuntar al POUM o Partido Obrero Marxista. Estuvo en las afueras de la ciudad de Huesca, dejando de matar algún enemigo, con el que se cruzaba, pero su espíritu respetaba la vida de los hombres. En cierta ocasión se encontró en el frente muy cerca de un soldado nacional, pero no le disparó,  porque le dolía la muerte de un hombre.  Fue herido en Monflorite y llevado al Hospital Provisional de Siétamo y de allí lo llevaron a Tarragona.

El año de 1937, la prensa de De “Paris. Soir”, cambió el destino de Saint  Exupéry de Barcelona por Madrid. Cerca del Hotel Florida cayó un obús y todos los huéspedes, se pusieron nerviosos   las mujeres todas lloraban. Saint Exupéry, los calmó dándoles un pastel a cada uno. Pero no vió sólo a los clientes de un Hotel, sino que por el frente,  vio como y escuchó como hablaban un soldado de la República y otro que estaba en una trinchera de los Nacionales y escuchó   cómo se despedían,  diciéndose: buenas noches, amigo. También me contaron que en el frente de Aragón, se dieron conversaciones entre,  soldados de la República y otros de Franco, que desde las trincheras llevaban conversaciones amistosas, hasta que tenían que esconderse en sus refugios.

De estas situaciones, se desprende que Saint  Exupéry daba una visión humanitaria de la Guerra, pero alejada de la guerra,  como se ve en esas conversaciones entre soldados enemigos, que no se odiaban. Su interpretación del sentido de acabar con esa Guerra, se debe a una visión humanitaria, separada del problema ideológico. Relataba hechos guerreros en los que entraba la poesía y eso explica como en el “Pais -Soir”, su Secretaria se echó a llorar al transcribir uno de sus textos.

Antoine  de Saint Exupéry, describió la contienda española, dando un preludio del Cataclismo Mundial, que estaba llegando a Europa y el genio de Sant Exupéry desapareció por la mañana del día 31 del mes de Julio de 1944, en un reconocimiento de Francia y del que nunca regresó.

domingo, 15 de abril de 2018

LOS HERMANOS VALERO, POR LA RUTA DEL VINO Y DEL ACEITE




Dos son los hermanos Valero, del pueblo de Used, a 1.150 metros de altura y que rigieron un Bar en la Calle de Artigas, hasta que se retiraron. Pero lo más importante de su vida lo pasaron en el pueblo de Used, donde nacieron,vivieron y por la ruta del aceite y del vino, cruzaron la Sierra de Guara muchísimas veces. Vivían muy próximos los pueblos de Used, Bara y Zamora,que se encuentran en la cara Norte de Guara, pero están situados en la parte suroeste del Alto Gallego.   Por el Oeste están están cerca de Nocito, perteneciente a la Hoya de Huesca y por arriba próximos   a Abellada y a Azpe. Estuvo poblada su tierra por vasco-ibéricos y más tarde llegaron los visigodos y por eso vivían en la Montaña bastantes individuos rubios. En el pueblo producían patatas, trigo para el gasto de pan, vacas royas o rubias en dos casas y ganado lanar. Lo mismo hacían en los pueblos de la comarca. Más tarde se fueron marchando sus habitanes, habiendo desaparecido el pueblo de Zamora y ¡cuántos poblaron con tan bello apellido y el de López de Zamora toda la tierra baja!.
Me parece que los Valero abandonaron Used el año de 1959,como también bajaron los de Casa Buil, de Zamora, de Urbez, de Nasarre, de Oliván, de Cañardo y de Binueste. Ahora en Used pasa temporadas un francés, en el edificio de la Escuela, que compró y allí debe  gozar de la soledad de las altas tierras de Guara. 
Los franceses han demostrado una gran inquietud, antes que los solitarios altoaragoneses por aquellas tierras y hasta los escritores, como Lucien Briet , han dejado sus sapientes libros que han iluminado la soledad de Guara y de todo el Pirineo.
Los hermanos Valero abandonaron su casa , que algún visitante de Used la quemó , pero ellos no podrán jamás olvidar cuando participaban en la ruta del vino y del aceite, que subían desde Los Molinos de  Sipán. Desde este pueblo hacían el ascenso por Santolaria,  Cuello Bail , paso de ganado  por el que subían los hombres y los animales al que llamaban el Carnerage, en una de cuyas laderas se encontraba la Caseta de Bruna. Es un monte alto y en sus laderas se criaban patatas , que luego se vendían en el  Somontano para sembrar.Me acuerdo de una vez, que llevé al monte de Arguis al guardia municipal Baldomero  Ara, a ver una parcela en el monte,destinada a producir patatas.
Un año que nevó mucho, Faustino  Valero, cuando tenía catorce años de edad y con otro muchacho,se vieron apurados para llegar a Used y durmieron en la caseta de  Bruna.
En Castejón de Arbaniés,vive el señor Nicolás  Fañanás, que es descendiente de casa Bruna de Santolaria. En aquella caseta pasaban temporadas vecinos de Santolaria e incluso los hermanos Valero, participaron en el pastoreo de gando lanar por aquellos montes. En la ruta del vino y del aceite ,bajaban patatas , para sembrarlas, sobre los lomos de unos mulos , aparejados con verdadero arte, con los que podían presumir. En el Somontano, aquellas patatas probaban muy bien y deban un buen resultado.Vendidos los tubérculos , compraban aceite y vino, el de los que unas veces cargaban con dos boticos de vino por macho y otras veces dos boticos de aceite.
El Camerage era un monte de Vallés de Castilsabás y desde allí tenían que bajar a cruzar el río Guatizalema, para llegar a Used. ¡Cuantas veces  encontraron los hermanos Valero nieve en sus expediciones por la ruta del vino y del aceite!.En una ocasión era tal la cantidad de nieve que dificultaba la marcha,que tuvieron que soltar los ramales que unían la cola de lun mulo con el cabestro del siguiente y dejarlos caminar solos.    Aquellos animales, además de tener una figura artística,eran inteligentes porque llegaban sanos y salvos a las cuadras de Used.  
      

sábado, 14 de abril de 2018

Chulio Balenga Loscertales, de Labata




Frente a la señorial y popular Fuente Ornamental de la Plaza de Navarra, que con el Casino al fondo, levantado a finales del siglo XIX y principios de XX, por el Arquitecto catalán Bonells y a un lado del  edificio del Estado, que proyectó, hace ya muchos años, el oscense Señor Farina, que había contemplado siendo joven, la Arquitectura Natural en tierras filipinas,  Chulio se sentaba gozoso en uno de aquellos bancos que los árboles de la Plaza y   en verano impedían que le diese el sol y en invierno, habiendo perdido sus hojas, ese sol le acariciaba su anatomía.   
¡Qué diferente ambiente se respira, hoy en día, y que visión urbana recrea el ambiente de la Plaza de Navarra,  distinto de   la rusticidad del medio ambiente del pueblo de Labata, que se contemplaba el año de 1936, en que nació Chulio, debajo mismo o sea, al pie de la  Sierra de Guara!.
¡Qué diferencia separaba su estancia en “o lugar de Labata, que en cuenta de asentase en os bancos d´a  fermosa  Plaza de Navarra, lo feba  en un asiento de piedra,  posato  ta un lado d’a puerta  d´a suya casa,  adornata por un arco, també feito de losas pétreas,  tallatas con mallos de fierro!.
Por el Norte de Labata, se contempla por la Sierra de Guara, la tierra de esa Sierra, ya que por su ladera corre una bella carretera, que pasa por el Señorío de Aniés de Guara, en la que se  encuentra  San Román de Morrano, y que  lleva  al histórico pueblo de Bierge.  Entramos en San Román de Panzano en cierta ocasión con mi nieto Pablo  Adiego Almudévar y con dos amigos de Siétamo y nos pusimos a observar debajo de la Sierra de Guara la hondura donde se asientan Casbas y Labata. San Román de Morrano está vigilando el Norte de dicha Sierra y en esa tierra pura, a la que subía desde su casa,  en que  nació Don Alfonso Buil  Aniés, que le llevó, en las alturas a recoger hierba verde para dar de comer a sus animales. Pero esta actividad lo impulsó a inventar aparatos industriales, de los que hizo propaganda en América del   Sur y del Norte.
Este industrial ya tiene más de noventa años, en tanto su paisano del cercano pueblo de Labata, Chulio Barluenga, ha vivido hasta hace unos escasos días, desde el año de 1936 hasta el 2.017. En Labata nació Chulio Balenga y desde San Román de Morrano, se veía Labata y el Monasterio de  Casbas. Fue “ tres añadas t’a escuela, de seis a nueve años, en o lugar de Labata. Entre nusatros os criallos  charrabanós toz en aragonés, pero en a escuela si nos pillaban charrando en aragonés nos trucaban con bimbres u con a regla de tres filos en o tozuelo”. Dice Chulio que a la escuela asistían treinta y tantos críos y cincuenta y tantas crías. Os mayestros charraban sólo en castellano”. Este Chulio era un hombre sencillo y su padre no sabía apenas hablar en castellano. “Yo charraba con lolo, en aragonés y , claro, dimpués plegaba en ta escuela, y no m’alcordaba… y ”¡tochazo!”.   
Subiendo desde Labata a Bierge por la carretera, que corre por la ladera de la Sierra, en el pueblo de Morrano, se asentaba una Escuela, dirigida por el Maestro, nacido en Velillas y llamado Domingo Ballarín Torres, que ya en el año de 1.875,  ejercía de Maestro en Morrano, donde acudían a formarse los niños de San Román de Morrano y de Yaso.
 Así como en Labata , el padre de Chulio Balenga, que ha vivido hasta el año de 2.017, se preocupaba de que su hijo aprendiera sus primeras letras, pero como él sólo sabía hablar la Fabla, no tenía fuerza moral para impulsar el castellano en su hijo.   
También existían dificultades educativas en la  educación  en  mi  pueblo, porque cuando en el año de 1936, en los primeros meses de ese año, asistía yo a la Escuela de  Siétamo, el Maestro señor Bispe, nos examinaba las uñas, con una delgada caña, con la que golpeaba las manos de quienes las llevaban sucias, con una delgada caña.
Lo mismo pasaba en la Escuela de Morrano, como me explicó Alfonso Buil Aniés, pues uno de los padres de los alumnos, se le presentó al Maestro Don Domingo Ballarín con una pequeña vara de madera, para cambiarle la costumbre de golpear con caña, que según me dijo Alfonso Buil Aniés, producía mayor dolor que la de madera. Por lo que alguien me dijo que el Maestro no cambió la caña por madera y esta resistencia al   bienestar de los niños, que trataban,  en ocasiones como la presente, no de seres humanos, sino de animales. Sin embargo  el Maestro Don Domingo Ballarín, aunque no había superado algunos  puntos oscuros en la docencia, estaba seguro de que aquellos niños del “cobajo” de la Sierra de Guara, debajo de la Cueva de Chaves y de la Gruta de Solencio, saldrían adelante. Y así ocurrió con los parientes del Maestro y con  Alfonso Ruiz de Morrano, que viajó por todo el mundo y  vio  correr las piedras en el Valle de la Muerte en los Estados Unidos. 
En cambio, en el pueblo de Labata, como he escrito, el padre de Chulio Balenga, estaba muy preocupado de que su hijo aprendiera el castellano, ya que solamente podía expresarse en Fabla Aragonesa.  Nació  Chulio en Labata el año de 1936 y  no pudo asistir a la Escuela, más que tres años, porque el hambre le hizo trabajar de “chulo”. Empezó su vida laboral en Santa  Cilia de Panzano, en casa Vitales de Junzano y luego fue a Casbas, donde trabajó en Casa Cereceda y en Casa Clavería. Yo asistí al Colegio de San Viator, donde me senté en la misma mesa con Luis Cereceda. En Casbas tuvo la oportunidad de asistir durante tres años a una escuela de adultos. “Si no por esto….  poco que sé lo aprendí astí”, escribió Chulio.Tuvo después unos largos años de actividad unos en Huesca , en la construcción,en el Pantano de Calcón y en muchas otras empresas en la provincia de  Huesca, la última actividad la ejerció en las Brigadas de Limpieza del Ayuntamiento de Huesca. Se jubiló en 1996 y murió el día 12 de Octubre de 2017.
¡Con qué cariño asistieron a su entierro, allá en Labata, sus amigos de la Fabla Aragonesa, en la iglesia de Labata y  “en o suyo zaguer viache en ta o fosal  d’o lugar!. Un amigo mío escribió:” o día 13 l’acompañemos belunos d’o  Consello en o funeral en ta ilesia de Labata y en o suyo zaguer viache ente o fosal d’o lugar,  un gran vol  de muitos butres  feban fachendosos vueltas por o cielo”. Era triste aquel sobrevolar de los buitres sobre el cementerio y tal vez aquellos buitres estaban dando el pésame al pueblo de Labata, porque tenían que volar para dar el pésame a los pocos habitantes que quedaban en él. Cuando Chulio era un niño,  en aquel pueblo vivían más de cien niños y niñas y ahora, tenían que volar los buitres, porque ya no quedaba ningún niño.
Desde este mirador del pueblo de Morrano, se contempla Labata, el pueblo natal de Chulio Balenga y Casbas, donde” s´ascuita ixe aire aragonés, tan polito, feito  d’as aireras que baixan  d’o tozal de Cubilars,  espandindo o suyo son por o Monesterio de Casbas”. Cuando voy a Labata, ya escucho un sonido, que me parece ser una voz humana, que tal vez sea la de Chulio, que me saluda, cuando paso por su camino, como recordándome los saludos que nos transmitíamos en la Plaza de Zaragoza.
“Hasta as boiras,  fablaban en a luenga  d’Inacio Almudévar,  en a de Chesús  de Biarge,  n’a de casa nuestra, sorprendiéndonos siempre con  a  suya memoria funda, como as gorgas  d’o Calcón”.  Rafel Vidaller Tricas ha escrito en estas  líneas,  lo  mismo  que yo, más arriba, escribo sobre una voz misteriosa , que me parece ser la voz de Chesús.    



 

¡Mambrú se fue a la Guerra!, y siempre tendremos más guerras.

    Yo nací antes de la Guerra Civil, y tal vez los niños de Siétamo, tuviésemos un aviso profético  de que no faltarían nunca guerras en ...