sábado, 30 de marzo de 2019

Javier Ciprián Baldellou.-




A este Javier lo conozco desde hace muchos años, y él conoce a todos los oscenses, desde que era un niño. Estaba yo de Veterinario en Casa de Escartín del Coso Bajo, y allí atendía a los ganaderos que compraban en ella los piensos con los que alimentaban a sus ganados, desde caballos, ganado vacuno, canes y conejos y gallos y pollos. Javier era un chico simpático, que venía   por  el  almacén   del  señor  Escartín. Era un chaval que se interesaba por la ganadería y siempre nos preguntaba por la utilidad y la belleza de los animales, que allí visitábamos.
Era Javier un niño que tenía una personalidad especial por su simpatía y por las continuas preguntas que nos hacía a los veterinarios de aquellos Almacenes. Tenía curiosidad por todas las cosas que veía  en  aquellos  animales  y  de los  alimentos  que  les  proporcionaba   Don Angel   Escartín. En aquellos tiempos de su niñez tenía un desarrollo extraordinario, pero como es natural que un niño carezca de  barba,  a  él no le crecían los pelos  que en su cara, más tarde le crecieron y siendo ya de unos dieciséis o diecisiete años, ya se dejó en alguna ocasión barba ornamental en su rostro, que unida a su tamaño enorme, le daban personalidad.
Julio tuvo una oportunidad de trabajar en aquella tienda y  el  señor  Escartín  le dio responsabilidad para ganarse la vida, que por desgracia no fue mucho el tiempo que le concedió, sino unos ocho días. Tuvo la desgracia de no trabajar muchos días en aquel comercio, para alimentar a nuestros amigos los animales, pero fue mayor la  desgracia  que no percibió ni un céntimo de premio a ese trabajo, que realizó con gran ilusión.
Yo, pasada una buena temporada tuve que trabajar en distintos lugares en mi profesión de Veterinario y ya veía escasas veces la magnitud corporal de Javier que iba creciendo y echando barba a su rostro. Pero como siempre hemos sido amigos de este “gigante”, vi como siguió buscando trabajo y se presentó a las oposiciones al Hospital de la Seguridad Social. Siempre tuve buenas  noticias  de  Javier,  pues  su tamaño daba fe a los enfermos que acudían al Hospital, transmitiéndoles a los mismos algo de su buen humor, ya que no les iba mal ese buen carácter.
A Javier  Ciprián y Baldellou, lo conozco desde que yo, tenía veintiseis años de edad y ahora ya estoy cargado con ochenta y ocho. Es una persona que conoce a todo el pueblo de la ciudad de Huesca. Efectivamente, todos los habitantes de la ciudad de Huesca, lo conocen, porque todos se han fijado en su enorme cuerpo de más de dos metros de altura, aunque sus apellidos, pasan desapercibidos para la multitud de conocidos y amigos de la Ciudad. Yo, que conozco a Javier ya hace gran número de años, no me había fijado hasta el día de hoy, día 28 de Marzo de 2.019, que se llamaba además de  Javier,  Ciprián  y Baldellú  y casi me había olvidado de su nombre Javier, pero me he alegrado de aprenderme sus dos bellos apellidos tan altoaragoneses  de  Ciprián  y  Baldellú. ¿Cómo es tan difícil aprenderse este nombre de Javier, procedente de Navarra, que limita con la provincia de Huesca, al que acude el día de su santo a la iglesia de San Francisco Javier, a venerar a este santo tan próximo a  El,  la  provincia  de  Huesca!.  Cuando miro su enorme cuerpo, no me acuerdo de su nombre, pero si que estoy admirado de su enorme humanidad.
 Ahora ya está jubilado  y  cómo anda con cierta dificultad  y con sus ojos distingue con dificultad los objetos, pasa muchos ratos de su vida en el Bar “El Galileo”.  Está sentado en una butaca, a la que se acomoda con cierta dificultad, porque casi no cabe en ella y entonces su vientre enorme, sale de la silla adelantando su volumen hacia la mesa, donde le depositan un café.
Y allí, se va tomando un café tras otro y bromeando con los que van llegando al Café y saludando a los que pasan por la calle, delante de su “trono cafetero”. Pero él que ya no puede ayudar a los enfermos del Hospital de la Seguridad Social, cuando viene de comer en casa de su hermana, se trae unos trozos de pan para satisfacer la vida a muchos gorriones, que bajando de los próximos árboles, acuden a sus pies a que les reparta  migas,  que consumen con placer.   


Costa vivió en la pobreza y soñó en la riqueza de su provincia.



Hace ya muchos años que pronuncié unas palabras,  la  víspera  de  las  Fiestas de Graus y el Ayuntamiento me dio como premio, un retrato de un gran hombre altoaragonés, llamado Joaquín Costa.
 Cuando entro en el piso de casa Almudévar de Siétamo, me miro y al lado de su puerta, siento la mirada de Joaquín Costa, que fue un hombre que no alcanzó riqueza monetaria para sí mismo ni para su pobre y sacrificada familia. Ese retrato de un hombre pobre en dineros y riquísimo en ideas que buscaban alcanzar la grandeza de las tierras oscenses, a través del agua de sus ríos. No puedo olvidarme, cuando voy a entrar en el piso donde nací, de mirar su retrato, que me regalaron en Graus, de un hombre que no pasó de pobre él mismo y su familia, pero que concibió  la  riqueza  no  sólo  para  él, sino para todos los altoaragoneses.
Su vida fue y todavía continúa en Aragón, como la de  un  profeta  aragonés,  que soñó con el bienestar y el progreso del Alto Aragón, bautizando con agua de sus ríos, esas tierras sub -pirenáicas,  que siempre han estado al servicio de España, como cuando se cortaron en el sur de la Provincia, aquellos resistentes árboles, que aguantando la sequía durante sus vidas, sirvieron para crear la Flota que se dispuso por parte de España, para evitar que Inglaterra, arruinara su porvenir. Esos restos de bosques, se quedaron en la Sierra de Alcubierre, aumentando con su desaparición, la  labor  antiarbórica  en aquella Sierra de Alcubierre.
Pero no sólo fueron los ingleses los que procuraron destruir la creatividad de España, sino que también   los  españoles   la han forzado a hacer de Aragón, principalmente a la provincia de Huesca, una tierra de  una sequía desgarradora  y de un aislamiento casi absoluto con Europa.
Alfonso XII y su hijo Alfonso XIII, comenzaron a comunicar España con Francia y en 1928, se inauguró la  Estación  del  Canfran.  Hace  alrededor  de  cien  años  que se empezó a crear el Ferrocarril  Internacional y todavía estamos esperando que se realice un paso unitario con Europa.
Y todavía sigue el abandono de Aragón, pues han terminado la comunicación con Francia   a través de  Cataluña, pero aquí sigue el ferrocarril por  Canfrán, con el arreglo de su estación y Aragón por el que deben pasar los ferrocarriles a Valencia , a Madrid, a Andalucía y  porque  no decirlo , a las  Africas , y por Canfran, ya no pasa nadie.
 Entre tanto se  van  los  altoaragoneses  a  Cataluña  y  aquí  nos estamos convirtiendo en un desierto. Si todavía no es un desierto, lo evitó  Joaquín  Costa,  que  nos narra su viaje a Graus, donde acudió a acompañar a su padre en su muerte. Escribe:  ”Llegamos  a Graus a las diez y media de la noche y cené en casa del Noy; fui a casa y hallé a mi padre sufriendo en la cama por consecuencia de los calores del día y riesgos de la noche, un hermano fallecido, una hermana sirviendo, mi madre envejecida y acabada,  y todos y todo en la miseria, apiñados  en la mitad de habitación que tenían antes, de la cual los echa Pajizas este año, y cuyo Pajizas les quiere poner pleito negándoles jornales”.
“Cuando me quedé solo a media noche, rompí a llorar desconsoladamente, considerando tanta miseria en contraste con mi edad, y con mi imposibilidad actual de remediarlo, y con que yo hubiera podido  arreglar  todo  esto  si  hubiera  sido  jornalero,  y  con  qué  lejos de eso les había estado pidiendo duros y duros todo el año, habiendo  pedido prestados los dineros con los que había comprado las botas que llevaba. Cuando fui a ponerme en la cama y vi el color y pobreza de la sábana de debajo, rompí a llorar más desesperadamente todavía, considerando que mi padre había dejado el colchón para prepararme esta cama, y quizá hasta la pobre sábana, acordándome del gasto loco hecho por vosotros en el viaje de Madrid aquí, la decadencia de una familia y la triste situación mía. No podía consolarme en la cama; me arrancaba el cabello de la cabeza, me escondía la cara en las manos como avergonzándome de mí mismo aun en la oscuridad; estuve llorando hasta que ya muy entrada la noche, me tendió el sueño.  ¡Ay!. Quisiera no haber venido, y quisiera haber venido y siento que se haya muerto mi hermano, me alegro y siento haber estudiado, etc., etc. “
¡Qué contraste entre tu pobre situación económica y la riqueza provocada por tí, Joaquín Costa en las tierras oscenses con su conversión, de sus ríos en pantanos, canales y acequias para convertir sus  secanos  en fértiles  tierras  de  huerta!. Sin enriquecerse Joaquín Costa regó la provincia de Huesca, pero él vivió en la casi pobreza.
Pero ¡qué sufrimientos padeció Joaquín Costa en su relación con Conchita Casas “padeciendo la afrenta de conocer cómo los Casas visitan Graus por ver de formalizar las relaciones con los Costa!.  “Los Casas jamás emparentarían con ellos por causa de  su  pobreza”. No sólo fueron los disgustos del amor los que sacrificaron a Joaquín Costa, sino los profesionales en 1874 en un Golpe de Estado. Había obtenido Joaquín Costa una plaza de profesor en la Universidad, que fue  rechazada  su  posesión .  Y Joaquín Costa se encuentra “no solo descalzado, sino también descolocado”. En 1875 en sus  anotaciones,  escribe :  agosto 12: hace siete días fuimos a Montearagón a pasar el día, era domingo. Se expresa así: Se han concluido las fiestas de San Lorenzo”.  La mirada sobre Montearagón la dirigía hacia Huesca, donde estaba su amada llamada apellidada Casas. El 17 de diciembre de 1877, fue Costa a visitar a Concepción Casas que en esa visita se lamentó del abismo religioso que los dividía y Joaquín no pudo evitar un abundante llanto, delante de Concepción y de su madre.
El sabio aragonés de Graus, Joaquín Costa ( 1847-1911),cultivó la amistad con mi tío Manuel Bescós Almudévar ( 1866-1928) con el tuvo una gran aproximación. Este tío mío, Manuel, era primo hermano de mi padre Manuel Almudévar y  que  “tan fiel al León de Graus, como para adoptar el transparente seudónimo de Silvio Kosti, y que al fin, fue autor del epitafio que campea en el sepulcro zaragozano de su maestro”. Se expresa así:
Aragón a Joaquín Costa-Nuevo Moisés- De una España en éxodo- Con la vara de tu genio inflamado-Alumbró la fuente de las aguas vivas- En el desierto estéril.-Concluyó leyes para conducir a su pueblo. A la tierra prometida.
Esta es la inscripción que escribió mi tío Manuel Bescós Almudévar, en la tumba de Joaquín Costa, y así como la obra de regadío de este Señor, todavía se está realizando después de la muerte del profeta Costa.
Pero en tiempos de Alfonso XII y de su hijo Alfonso XIII, se comenzó a preparar el ferrocarril que uniría a Europa con España por el Pirineo, todavía no se ha continuado la obra y los aragoneses, en nombre del resto de España, estamos reclamando su rápida construcción.

martes, 26 de marzo de 2019

El extremeño que luchó en su tierra y triunfó en Cataluña.-





Ya tiene años este trabajador intensivo nacido en la Provincia de Badajoz, pues pasó muchos años en su tierra, trabajando en una fábrica de Harinas, en la recogida de bellotas e incluso pastoreando cerdos por esos montes, de los que en siglos pasados brotaron muchos conquistadores de América. Salen de su boca las historias que pasó ya en su niñez, en aquellas tierras frondosas en encinas que proporcionaban alimento a esos pequeños cerdos, cuando de las ramas de aquellas encinas, brotaban las bellotas, que al caer al suelo o ser tiradas cuando se   las   golpeaba   con  largas   varas,  se  regocijaban  comiéndoselas con placer. Pero Luis, el pastorcico  se  veía apurado  por esa faena tan valiosa para tirar las bellotas al suelo, para que todos los cochinos pudiesen hartarse de comérselas. Aquellos cochinos que él apacentaba no eran   adultos, sino muy jóvenes y el niño Luis no daba abasto con una larga vara,  para  derribar las bellotas  para  satisfacer el apetito de tan voraces animales, Y unos corrían hacia un lado, en tanto que otros buscaban las bellotas en otros lugares opuestos a los que  estaban destinados. El  pobre  pastorcico  se ponía nervioso  al no poder llegar a dominar la piara de cerdos y muchas veces se echaba a llorar. Su apellido era vasco, proveniente de cuando en viejos tiempos de la reconquista, se repoblaban las tierras conquistadas, con gentes provenientes del Norte, pero él no recordaba aquellas tierras de las que procedía.  Sin  embargo   se acordaba de la tierra catalana, donde vivió feliz trabajando y criando a su familia. Él se acuerda de las distintas faenas que llevó a cabo  en su tierra natal y me ha hablado mucho de contemplar las ruinas y las escenas romanas desarrolladas en Mérida. Pero se interesaba de la civilización romana, sin olvidar los variados trabajos diarios en las tareas agrícolas y en un Molino de Cereales.
Pero en España que hacía ya varios siglos, que los extremeños habían conquistado las Américas,  como   Pizarro  y Hernán Cortés, siguió la emigración a América durante siglos y otros como el amigo mío, con su familia emigró a Cataluña, que fue un País que después de enviar emigrantes a las Américas, con motivo de la Filoxera, pasó a ser de una tierra agrícola, a ser una gran obra industrial.
Entre los catalanes del año de 1845 a junio de 1.902 surgió un gran escritor, que fue sacerdote y poeta español. El hecho de escribir en catalán lo hizo un príncipe de los poetas en dicha lengua. España aumentaba su prestigio con  hombres  notables , como Jacinto  Verdaguer.  En un viaje a Cuba termino el poema “La Atrlántida”. El sabio Menéndez y Pelayo, consideró a Verdaguer, “el poeta con más dotes creativos de España”.
Pero después del desarrollo literario de Cataluña, éste se convirtió en una zona industrial, la más desarrollada de España. Igual que los catalanes, al invadir Cataluña la enfermedad de las viñas, llamada la Filoxera, creó una situación revolucionaria y emigraron a América miles de catalanes, que prosperaban con la fabricación de vinos.
Y mi amigo extremeño trabajó en tierras catalanas, trabajando en varias actividades, hasta que entró a formar parte de una sociedad de transporte. Como suele suceder en sociedades, aquella en la que trabajaba se deshizo y los dueños de la sociedad, generosos le entregaron un camión industrial,  que  le ofreció la ocasión de convertirse en un transportista notable, que le llevaron a comprar dos vehículos, que le hicieron transportar mercancía por toda Cataluña.
Se casó mi amigo con una mujer, como él de tierras lejanas y que trabajaba sin parar, haciendo objetos con los que se ganaba la vida. Conozco a esta señora, a la que con frecuencia acompaña una nieta de unos ocho años aproximadamente, que tiene una gran inteligencia.
Han trabajado su marido y ella en Cataluña, donde tenía amigos ,unos catalanes y otros de diversos puntos de España y los días de fiesta jugaban en un Bar y almorzaban y conversaban con gusto. Estuvieron gozando de la vida muchos años, hasta que comenzó un movimiento , yo diría que antipolítico, y mi amigo al marcharse su hijo y su esposa a trabajar a la provincia de Huesca, ya no podía aguantar sólo en aquel ambiente que parecía revolucionario y vino a vivir a Siétamo. Es un hombre que se adapta a todos los ambientes y goza de la vida en la villa de Siétamo,donde con frecuencia acuden a visitarlo la familia de su hijo y la nieta ,ambiciosa de los conocimentos científicos de la Ciencia. Lo pasan muy bien y se alegran de estar en una tierra, de la que hace unos años, su población emigró a Cataluña y ahora son muchos los españoles de distintos lugares, que han vuelto a abrir las escuelas.
Se van repoblando zonas orientales de la provincia de Huesca y esperemos que el ferrocarril de Canfrán se lo tomen en serio para que Aragón forme parte de la Unión Europea de Francia con España.                                                                                                                   
  Y a mí me parece que Cataluña debe volver a desarrollarse, pero que también avance la tierra natal de Extremadura, donde trabajó y vivió algunos años mi buen amigo  Luis el estremeño  y  el ferrocarril europeo que ha de entrar por Canfranc,   enriquecerá toda España, ¡que lo hagan con prontitud, para que Aragón y España, sean una gran nación europea!.

sábado, 23 de marzo de 2019

Los jóvenes futbolistas de Huesca.-


  
En la calle que comienza a discurrir desde la Avenida de Juan XXIII, sale otra calle que conduce a las oficinas del Hospital de la Seguridad Social y al Cerro de San Jorge, que se llama también Calle de San Jorge. Cuando se llega por esta calle al gran solar, por el que corrían los trenes en tiempos pasados, se alza el hermoso Café "Galileo". En él y en la calle, de cara al sol, me siento delante de un velador y veo pasar, al lado de otros clientes, a muchos ciudadanos que atraviesan esa calle, unos hacia la Avenida de Juan XXIII y otros desde debajo de San Jorge al centro de la ciudad.
Son muchos los ciudadanos y ciudadanas que pasan por delante de los veladores del Bar, pero a mí me ha impresionado el paso de unos jóvenes, vestidos con el uniforme del equipo de fútbol de Huesca, que lo hacen separados generalmente en pequeños grupos. Me dan la impresión de ser unos jóvenes disciplinados, como suelen ser los jugadores deportivos y yo los miro y espero al día siguiente que vuelvan a pasar. ¿A dónde van caminando, muchos de ellos vestidos con la ropa que identifica a los muchachos con el equipo de fútbol oscense?. Lógicamente caminan al Campo de Deportes, especialmente de fútbol, al que se llega prontamente, desde el Bar, en que yo tomo un buen café.
Una tarde del mes de Marzo de 2.019, pasando cerca del Campo de Fútbol de San Jorge, observé como iban entrando por la puerta de sus rejas de hierro, unos jóvenes, vestidos en rojo y morado. Se veía en ellos que el juego que querían emprender era un partido de Fútbol.
Este detalle me dio la impresión de que esos jóvenes, entraban en el Campo de Fútbol , para cultivar las energías de sus cuerpos y alegrar a los aficionados del deporte futbolístico, con su juego y con sus triunfos.
Caminando a la pista donde los jóvenes se habían dirigido a cultivar la energía de sus cuerpos, me encontré antes de llegar al terreno de juego con un señor ,que me dijo llamarse Javier Labata, que estaba en el Campo  Deportivo, cuidando de los diversos campos de distintos juegos, como el Frontón de Pelota, que atrae también a varios jugadores de pelota  o pelotaris. Javier se encontraba saliendo de inspeccionar del  Frontón e iba a vigilar los distintos campos de juego, que se extendían por la zona de San Jorge. Le pregunté por su afición a la pelota y él que era de Labata, en la cara Sur de la Sierra de Guara, cerca de Sieso y de Casbas, me dijo que de niño había jugado a la pelota, pero a Javier la necesidad al desplazarse de esta zona hacia Huesca, como  ya  no quedaban en los pequeños pueblos posibles jugadores de edad joven, para jugar con ellos, casi todos los jóvenes de los pueblos del Somontano, tuvieron que huir hacia Huesca. Después de estar sentado con el señor Javier en un banco cerca de la entrada en frontón y a la sombra producida por el Sol, nos desplazamos a la puerta del  auténtico Campo de Fútbol de San Jorge.
Me quedé admirado de la afición de los jóvenes futbolistas a cultivar este juego, al que acudían gran número de jóvenes, que me hicieron pensar que lo que buscaban era llegar a jugar magistralmente el Fútbol y en otros momentos se entrenaban. Casi todos ellos eran jóvenes jugadores de gran ánimo o espíritu deportivo, con un deseo que les hacía pensar en entrenarse o en jugar algún partido de fútbol.
Una vez dentro del campo de fútbol, dirigidos por un señor ya un tanto mayor, entrenaban con disciplina y en silencio, porque sabían  que el deporte es una actividad noble y pacífica.

viernes, 22 de marzo de 2019

Pablo Neruda (2ª Edición)




La vida me va resultando como un espectáculo en el que ya de niño veía en mi maestro revestido con un guardapolvo, con sus gruesas gafas y su boina, que casi nunca se quitaba y luego con otros niños hacíamos barro orinándonos en la Tierra y creábamos huertos imaginarios.
Empezaba a ver la vida en los “cucos” encontrados en el campo de Las Valles, que envolvía  en  mi  pañuelo,   que  guardaba  en los aparejos de  la  burreta   torda de mi casa. Aquellos días en que fui montado en la burra, ocurrió  la  muerte  de  un  compañero  de  Escuela y empecé a ver lo contrario a la vida, como la muerte, al  pensar en el cuerpo de un muchacho que se agarró a un camión con su bicicleta y lo aplastó.
 Bajo la Lonja de la parroquia, estaba depositado el cuerpo del muchacho, en tanto dentro de la iglesia, se celebraban sus funerales. Estaban los fieles dentro de la iglesia y el difunto, en la Lonja dentro de su fúnebre caja, bajo los arcos de piedra  y un joven, ante mi curiosidad, la abrió y una moza me levantó y vi su figura  yerta , pero bella, extrañamente después de muerto con unos ojos totalmente abiertos.
De esas contemplaciones de hechos cotidianos o, según Unamuno “intrahistóricos”, antes de cumplir los seis años, pasé en un instante a verme introducido en los hechos históricos de la Guerra Civil. Un día, que sería por el mes de Julio o de Agosto, un cañonazo sonó cerca de mí y  a  continuación no cesaron de oírse los tiros de los fusiles y los traqueteos de  las ametralladoras.
A mi padre le pidieron las llaves del sótano del Palacio del Conde de Aranda, para meter en él a los detenidos, pro mi padre se negó porque aquel lugar le parecía tenebroso y cruel. Luego el Jefe de zona, le dijo que se fuera a Huesca con su familia y tuvo que ir por la provincia de Huesca  hasta  Zuriza, con intención de pasar a Francia. No hizo tal emigración, pero de acuerdo  de como  otros,  por ejemplo Pablo Neruda hizo viajes más atractivos y curiosos por todo el Mundo.
Cien años se han cumplido del nacimiento de este poeta  y cerca de setenta hace que  fuimos con mi familia en peregrinación por Huesca, Jaca, Ansó  y Zuriza.
Por aquellos años de mil novecientos treinta y cuatro estaba Neruda en Madrid, donde parecía que  el  ambiente  olía a la próxima Guerra Civil, que cuando llegó le hizo escribir:” Creo que esta época va a ser revalorizada históricamente en forma independiente a las pasiones políticas. Y va a asumir una categoría que hasta ahora no se reconoce…porque tuvo tales dimensiones  que  fueron….sumergidas en la sangrienta guerra que conocemos, que naturalmente los españoles no se han detenido todavía en el examen de sus pérdidas y de sus valores”.
Los hechos que durante ella ocurrieron, tocaron su corazón de poeta, lo que le llevó a repetirse: “Creo que esa época va a ser revalorizada históricamente en forma independiente a las pasiones políticas” y se dio cuenta de que España podía “sentirse orgullosa de aquella época” del 27 y sintió el dolor de la muerte de aquel Miguel Herrnández, que “hasta entonces era un genial aprendiz de poeta”; tuvo que llorar la muerte de Federico García Lorca, que “era uno de los poetas más extraordinarios… en que está unida toda la vida  física y biológica con los menesteres del alma y de la poesía”.
El concepto que Neruda tenía de España iba unido a la amistad con sus poetas y no es un recuerdo ”  como el que aparece en 1.935, cuando, cuando publicó su obra “Residencia en la Tierra”, en la que escribe las experiencias que había visitado en sus misiones diplomáticas en Ceilán, Birmania y llegando a ser cónsul en Colombo y en  Singapur. El mundo musulmán y el hindú le inspiraron versos que recuerdan la geometría musulmana a la que podemos admirar contemplando los mosaicos de sus mezquitas, incluídos los mudéjares que están r2evistiendo algunas capillas de nuestra capital oscense.
Neruda al escribir su memorial de la Isla Negra, hace un canto al “desencanto” de todo lo humano, deja sólo la ilusión de los árboles, los ruidos que producen los insectos en la selva y el ruido inmenso de la  Naturaleza, lo que hace que en él no permanezca la verdad del hombre y no mezcla “la vida física y la biológica con los menesteres del alma y de la poesía”, como él mismo escribió que hacía García Lorca. Neruda recuerda las batallas de los indios chilenos o araucanos y le lleva a cantar la gloria de Alonso de Ercilla, pero se abstiene de cantar esa gloria del vencedor español y canta el heroísmo de los araucanos.
Y Neruda se concentra en la recolección de todas las cosas que encuentra y de otras que pierde,como yo al ensuciar mi pañuelo aquel insecto con su “sangre” de color verde,tiré dicho pañuelo, pero un segador, un hombre  integro, me lo trajo luego a mi casa, Yo en las más cercanas salidas de mi pueblo, recogía también “esquilas con su cañabla”, caracoles, botes de farmacia,insectos, aparejos de caballerías, candiles de aceite y abarcas. Pero Neruda además se recogía lupas, mascarones de proa.
Isla Negra, donde se oyen y se ven las olas poderosas del Oceano  Pacífico. Allí contemplaba sus objetos, lo que tal vez le impedía subirse a hablar con el Creador. En los libros de Neruda  de los que dispongo, trata poco del hombre y mucho de las mujeres, recordando sus contactos con  ellas, con contactos como estos: “Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos.-te pareces al mundo en actitud de entrega”. 
El nombra el alma de García Lorca, pero no recuerda demasiado el alma humana, porque tal vez, como hombre criatura de Dios, obedece tan sólo a su fisiología particular, propia de su cuerpo. El tampoco cita mucho a los animales, pero canta la madera, el fuego, a la lluvia, al aire, al tomate, a la zanahoria y a la alcachofa, en las que ve las formas humanas de un guerrero.
Dios hizo bella la naturaleza humana y Neruda encontró belleza en la materia, pero su espíritu le hizo  surgir  esa belleza de la materia , pero se olvidó del alma, que es espíritu. Tal vez no se acordara demasiado del  “Padre Nuestro”, cuando dice : “santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino”. No es extraño que Neruda cuando llegaba el ocaso se asomaba hacia el océano y hacia los Andes y veía el grandioso espectáculo del crepúsculo: “grandioso hacinamiento de colores, rep2artos de luz, abanicos inmensos de anaranjado y escarlata”. Yo desde nuestra casa de Siétamo ,veo por el Norte Fraixinito o Fraxineto, el pico y el tozal de Guara, que nos separan el Somontano de la Montaña y tengo , como Neruda colgadas las abarcas, los cepos y los hierros del caldero del hogar, donde los campesinos se unían alrededor del fuego y contaban sus trabajos y sus aventuras con el uso de los cepos. También están presentes en mi mente los recuerdos de mi hermano Luis, el marino, como mapas y cartularios y de mi hermano el pequeño Jesús, que estuvo cerca de San Juan de la Peña muchos años.
Pero así como yo me he amado con mis padres y con mis hermanos, Neruda no amó a su padre, lo que le llevó a cambiarse su apellido paterno de Reyes por  el  que  le dio la fama de escritor,  a saber el checo Neruda.
Neruda, al llegar el ocaso se  asomaba  hacia el Océano y hacia los Andes y veía un crepúsculo lleno de “grandiosos hacinamientos de colores, repartos de luz, abanicos inmensos de anaranjado y de escarlata”.
¿No tendría Neruda algún proceso psicológico, al ver tales maravillas, que lo llevaría a olvidarse de su padre y de  su  apellido?.
El poema diez de su obra “ Veinte poemas de amor y una canción desesperada”, en su final dice hablando del Crepúsculo: ”siempre, siempre te alegras de las tardes- hacia donde el crepúsculo corre borrando estatuas”, como si ese crepúsculo le borrase la idea de Dios.
Hay quien asemeja a Neruda con Picaso, pues ambos dedicaron parte de su arte a Stalin. Neruda le cantó con su poesía y Picaso le ofreció un retrato. Ambos fueron premiados por la Unión Soviética con el premio de la paz. Parece que Neruda no amaba a Dios, porque tuvo un compromiso pol2ítico con el paraíso comunista y esa poesía política fue la peor de Neruda, que se olvidó del amor de Dios.
Neruda quiso tener un compromiso político con el paraíso comunista y esa poesía política es lo  peor de la obra de Neruda.  Parece mentira que un poeta como Neruda,cantase la belleza de la Naturaleza creada en este mundo, no por la política del paraíso soviético, sino por algún  Ser superior a la naturaleza humana. No logró Neruda, tan poético en sus cosmologías, salir de un fin vulgar, con sus panfletos, que él quería convertir en divinos.
No hizo Neruda como Sastre, también comunista, que  al estar próximo a su muerte, escribió “He luchado denodadamente por un mundo en el que no me gustaría ser ciudadano”, pero Neruda, quizá inspirado por la poesía, dio un nuevo cambio, volviendo a la poesía dedicada a los objetos corrientes, a esas vulgares cosas que tienen, muchas veces, la virtud de devolver la alegría perdida.
Pero siempre me acordaré del poema número veinte, que dice así: “Puedo escribir los versos más tristes esta  noche.- Escribir, por ejemplo : La noche está  estrellada- y tiritan azules los astros, a lo lejos”- El viento de la noche gira en el cielo y canta.-Puedo escribir los versos más tristes esta noche.- Yo la quise, y a veces ella también me quiso”.

Pablo Neruda.-





La Vida me va resultando como un espectáculo en el que ya de niño veía a mi maestro revestido con un guardapolvo, con sus gruesas gafas y su boina, que casi nunca se quitaba y luego con otros niños hacíamos barro orinándonos en la tierra y creábamos huertos imaginarios.
Empezaba a ver la vida en los “cucos” que envolvía en un pañuelo,  en la burreta torda de mi casa y de la que todavía guardo su pesebre y en mis compañeros de la Escuela de Siétamo y empecé a ver la muerte, al enseñarme el cuerpo de un muchacho que se agarró a un camión con su bicicleta y lo aplastó. Estaban los fieles dentro de la iglesia y el difunto dentro de su fúnebre caja, bajo los arcos de la Lonja y un joven, ante mi curiosidad, la abrió y una moza me  levantó y vi su figura yerta, pero bella.
De estas contemplaciones de hechos cotidianos o, según Unamuno “intrahistóricos”, antes de cumplir los seis años pasé en un instante  a verme introducido en los hechos históricos de la Guerra Civil. Un día, que sería del mes de Julio o de Agosto, un cañonazo sonó cerca de mí y a continuación no cesaron de oírse los tiros de los fusiles y los traqueteos de las ametralladoras.
A mi padre le pidieron las llaves del sótano del Palacio del Conde de Aranda, para meter en ellos a los detenidos, pero mi padre se negó porque aquel lugar le parecía tenebroso y cruel. Luego el jefe de la zona le dijo que se fuera a Huesca con su familia y tuvo que ir por la provincia de Huesca hasta Zuriza, con intención de pasar a Francia. No hizo falta tal emigración, pero me acuerdo de cómo otros, por ejemplo Pablo Neruda hizo viajes más atractivos y más curiosos por todo el mundo.
Cien años se han cumplido del nacimiento de este poeta y cerca de setenta hace que fui con mi familia en peregrinación por Huesca, Jaca, Ansó y Zuriza. 
Por aquellos años de mil novecientos treinta y cuatro  estaba  Neruda en Madrid, donde  parecía que el ambiente olía a  una próxima  Guerra Civil,  que cuando llegó, le hizo escribir: ”Creo que esa época va a ser revalorizada históricamente en forma independiente a las pasiones políticas. Y va a asumir una categoría que hasta ahora no se reconoce…porque tuvo tales dimensiones que fueron …sumergidas  en la sangrienta guerra que conocemos, que naturalmente los españoles todavía no se han detenido en el  examen de sus pérdidas y de sus valores”.
Los hechos que durante ella ocurrieron, tocaron su corazón de poeta, lo que le llevó a  repetirse: ”Creo que esa época va a ser revalorizada históricamente en forma independiente a las pasiones políticas” y se dio cuenta de que España podía “sentirse orgullosa de aquella época” del 27 y sintió el dolor de la muerte de aquel Miguel Hernández que “hasta entonces era un genial aprendiz de poeta”; tuvo que llorar la muerte de Federico García Lorca, que ”era uno de los poetas más extraordinarios...en que está unida toda  vida física y la biológica con los menesteres del alma y de la poesía”.
El concepto que Neruda tenía de España iba unido a su amistad con sus poetas y no es un recuerdo como el que aparece en 1935, cuando  publicó  su obra: Residencia en la Tierra, en la que escribe las experiencias que había vivido en sus misiones diplomáticas  en Ceilán, Birmania y llegando a ser cónsul en Colombo y en Singapur. El mundo musulmán y el hindú le inspiraron versos que recuerdan la geometría musulmana,  a la que podemos admirar contemplando los mosaicos de sus mezquitas, incluidos los mudéjares que están revistiendo algunas capillas de nuestra catedral  oscense.
Neruda, al escribir su memorial de la Isla Negra, hace un canto al “desencanto” de todo lo humano, deja sólo la ilusión de los árboles, los ruidos que producen los insectos en la selva y el ruido inmenso de la naturaleza, lo que hace que en él no permanezca la verdad del hombre y no mezcla “la vida física y la biológica con los menesteres del alma y de la poesía”, como él mismo escribió que hacía García Lorca. El recuerda las batallas de los indios chilenos o araucanos y le lleva a cantar la gloria de Alonso de Ercilla, pero se abstiene de cantar la gloria del vencedor español y canta el heroísmo de los araucanos. Y Neruda se concentra en la recolección de todas las cosas que encuentra  y de otras que pierde, como yo al ensuciar mi pañuelo aquel insecto con su “sangre “ de color verde, tiré dicho pañuelo, pero un segador, un hombre  íntegro, me lo trajo luego a mi casa. Yo en las más cercanas salidas de mi pueblo, recogía también “esquilas con su cañabla”, caracolas, botes de farmacia, insectos, aparejos de caballerías, candiles de aceite y abarcas. Pero Neruda además se recogía lupas, mascarones de proa, vajilla procedente de bares y de tabernas, etc, etc, que exhibía en sus residencias, como en la de la Isla Negra, donde se oyen y se ven las olas poderosas del Océano Pacífico. Allí contemplaba sus objetos, lo que tal vez le impedía subirse a hablar con el Creador. En los libros de Neruda de los que dispongo, trata poco del hombre y mucho de las mujeres, recordando sus contactos con ellas, con versos como estos: ”Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos,-te pareces al mundo en tu actitud de entrega”. El nombra el alma de García Lorca, pero no recuerda demasiado el alma humana. Tampoco cita mucho a los animales, pero canta a la madera, al fuego, a la lluvia, al aire, al tomate, a la zanahoria y a la alcachofa, en la que ve las formas humanas de un guerrero. 
Yo desde mi casa de Siétamo veo Fraixinito o Fraxineto, el pico y el tozal de Guara, que nos separan el Somontano de la Montaña y tengo, como Neruda colgadas las abarcas, los cepos y los hierros del caldero del hogar, donde los campesinos se unían alrededor del fuego y contaban sus trabajos y sus aventuras con el uso de los cepos. También entre mis recuerdos cuentan los de mi hermano el marino, como mapas y cartularios.
Pero el poeta tenía el inconveniente de que su padre le era hostil y tal circunstancia le llevó a cambiarse el apellido paterno de Reyes por el del escritor checo Neruda
Neruda, al llegar el ocaso se asomaba hacia el océano y hacia los Andes y veía el grandioso espectáculo del crepúsculo: ”grandiosos  hacinamientos de colores, repartos de luz, abanicos inmensos de anaranjado y escarlata”.¿No tendría Neruda algún proceso psicológico, al ver tales maravillas, que lo llevaría a olvidarse de su padre y de su apellido?.El poema diez de su obra Veinte poemas de amor y una canción desesperada, en su final dice hablando del crepúsculo:  ”siempre, siempre te alejas en las tardes-hacia donde el crepúsculo corre borrando estatuas”, como si ese crepúsculo le borrase la idea de Dios.
Hay quien asemeja a Neruda con Picaso,  pues ambos dedicaron parte de su arte a Stalin; Neruda le cantó con su poesía y Picaso le ofreció un retrato. Ambos fueron premiados con el premio de la Paz, en la Unión Soviética.
Neruda tuvo un compromiso político con el paraíso comunista y esa poesía política es lo peor de la obra de Neruda. Aquel hombre tan poético en sus cosmologías se torna vulgar y pasado de tiempo en sus panfletos, que él querría convertir en divinos.
No hizo como Sartre, también comunista que al estar próximo a su muerte, escribió: ”He luchado denodadamente por un mundo en el que no me gustaría ser ciudadano”, pero Neruda dio un nuevo cambio, volviendo a la poesía dedicada a los objetos corrientes, a esas vulgares cosas que tienen, muchas veces, la virtud de devolver la alegría perdida.
Pero siempre me acordaré del poema número veinte, que dice así: : “Puedo escribir los versos más tristes esta noche.-Escribir, por ejemplo: “La noche está estrellada,- y tiritan, azules, los astros, a lo lejos”.-El viento de la noche gira en el cielo y canta.-Puedo escribir los versos más tristes esta noche.-Yo la quise, y a veces ella también me quiso.”

martes, 19 de marzo de 2019

Gibraltar, colonia inglesa en España




Me he quedado absorto de leer estas palabras de Otto Von Bismarck, que dice así: “La nación más fuerte del mundo es sin duda España. Siempre ha intentado autodestruirse y nunca lo ha conseguido. El día que dejen de intentarlo, volverán a ser la vanguardia del mundo”.
¿Qué habría visto Von Bismarck en el comportamiento de los ingleses con su política a nivel mundial ?. Si,  Bismarck  fue uno más de los observadores políticos, pero fueron muchos los que,  como   Alvaro  Van  den Brule,  han escrito con claridad el comportamiento inglés en su tarea política.
Pero no es sólo Alemania, sino que también Francia, se quejó del comportamiento de los ingleses, como en el mismo centro europeo, el poeta francés Agustín Louis Marie de Ximénez (1726-1817), hombre proveniente de Aragón, era un poeta, que en sus versos llamaba a “atacar desde sus propias aguas a la Pérfida Albión”, como tantas veces se ha llamado a la Gran Bretaña.
Pero yo he observado el desprecio que Oficialmente se ha usado por la política inglesa a lo español, incluido incluso el idioma castellano. Desde siempre los británicos han tratado con desprecio a los españoles, como ahora se ve como los de habla inglesa, querrían muchos de ellos, paralizar el desarrollo de la lengua de España.
 Este desprecio lo noté yo cuando la Caja Rural nos llevó a Gibraltar. Nos subieron a la parte alta de la Peña de Gibraltar y allí después de  explicarnos  que   en  aquellos espacios, vivían unos monos, que, por lo visto descendían de aquella zona, hacía siglos. Nos llevaban a visitar alguna especie de museo, pero como aquellos  guías   turísticos,  querían  hacernos  contemplar  que  en  ese pequeño territorio gibraltareño, el dominio de los monos que representaban para ello, aquellos inocentes animales, no quisimos entrar dentro del museo, porque no admitíamos la superioridad inglesa sobre los españoles. Aquellos individuos que nos querían explotar el dinero con aquellos monos, callaban el español y sonreían cínicamente de nosotros.   
No podemos dejar de olvidar la Historia, que nos recuerda que los británicos han mirado siempre al continente europeo como poblado por enemigos. Lo peor es que la antipatía y el semi - odio  de  los ingleses al resto de Europa, en estos tiempos siguen siendo los mismos.
Tanto es así que los hijos de la “pérfida Albión siempre han deseado navegar solos”. Efectivamente al formarse el Mercado Común, se quedó navegando en solitario con su moneda inglesa.
Y ese desamor en una prueba realizada electoral, no hace mucho tiempo, ha manifestado el deseo de separarse del resto de Europa.
Pero al encontrarse los ingleses con su rechazo electoral a su unión con Europa, dan vueltas a su cabeza y unos dicen que no quieren su separación del resto de Europa  y  otros  que   que quieren, pero ponen como condición ventajas, que ya han perdido, al ser rechazada la sujeción de Gibraltar a Inglaterra. Y sueñan que Gibraltar no es una colonia inglesa en España, sino que es una maravillosa joya conquistada con su poder conquistador en la península ibérica. ¡Qué visión tan extraña esa de que Inglaterra conquistara a Gibraltar,  para  poseerla  eternamente!.
¿No se acuerdan los ingleses de las enormes colonias, que tuvieron por el mundo, como la India, Hong-Kong, Nueva Zelandia,  Africa  del Sur, para concretar en Gibraltar su amor colonial, que no puede nadie en el  Mundo  pedir  que  le  sea  devuelto?. Pero en ese deseo de conservar Gibraltar, no estará el amor de miles de ingleses que quieren vivir en España y desean al mismo tiempo estar cerda de su “amoroso recuerdo de Gibraltar”.
 Se entiende este corazón inglés viviendo en España, como muy próximo a Inglaterra, porque se encuentra cercano a Gibraltar.  En   cambio  el  grupo oscense que estuvo visitando Gibraltar se sentía despreciado por los guías que les acompañaban, que seguían hablando en inglés, llegando a despreciar su oferta, desde luego preparada para ganar dinero. Así como los ingleses que viven en Andalucía se sienten felices cerca de Gibraltar, nosotros los españoles invitados a visitar a los monos, nos sentíamos despreciados, en esta colonia, de la que se apoderaron los de la “Pérfida Albión”.
El gran escritor español de los Episodios Nacionales, Pérez Galdós en el libro Bodas Reales, escribe lo siguiente “ que es la Inglaterra esa puerca, ya sabe usted, a quien dan el mote de la perdida Albión”.

viernes, 15 de marzo de 2019

EL ALCANADRE Y ANGÜES




Los aspectos hidrológicos (relativos al agua),han sido ricos en manantiales y cuencas fluviales, pero !cuanto han tenido que trabajar los hijos de Angües para tener agua, porque a pesar de tener un pozo como el de Blecua, la fuente de Lavanera, la de la Grava, la del Alcanadre, la de Escario, la  de Fierro y otras más ,se han dado muchos años de sequía y escaseado el agua. Sin embargo Angües pudo haber tenido una fuente segura y esa fuente hubiera sido el río Alcanadre, pero sus enormes acantilados y su lejanía del pueblo han hecho que Angües viviera siempre el problema del agua, pues no se podían sacar acequias para remediarse y hacer un pueblo rico; pero a pesar de esas circunstancias se les rompió la realidad del canal que venía de El Grado, del que sí se hubieran podido sacar acequias para la agricultura, aguas para regar los prados y para beber el ganado, pero sobre todo para las industrias de los inquietos hijos de Angüés para fomentar las cuales han valido tanto, pero antes de hacer alusión a ellas, hablar de la Mutua Ganadera fundada por el cura de Casbas D.Julian Abellanas en el año 1912.!Cuanta agua, Dios mío!, si, pero cuando llovía porque en aquellos años siguientes a la sequía, era patente la escasez de agua, teniendo que ir a buscarla, allá  donde estuviera, con cántaros en los hombros, en las caderas, sobre las cabezas y el que podía, con las algaderas cargadas en el burro, pero era una pena ver a ese río Alcanadre "bastante caudaloso"y que no experimentaba estiaje importante, sumido en aquellas profundas simas y tan lejos del pueblo. Pero "actualmente el suministro de agua a domicilio está garantizado desde el embalse de Calcón; se almacena en el nuevo deposito elevado, en forma de copa, situado en la calle Medio.La traída de agua desde Calcón a Angües supuso un duro trabajo para los vecinos del pueblo,quienes realizaron la instalación de la tubería para la conducción subterránea del agua con las tradicionales herramientas del pico y de la pala."Calcón,!cuantos años estuvo la obra parada! y los pueblos de debajo de él,pasando muchos años de escasez de agua. Ahora está hecho el pequeño pantano que escasamente tiene 4 hectómetros cúbicos de capacidad, con lo cual no podrán regar desde Sieso hasta Angües, mas que alguna pequeña superficie,  no permitir  cultivos y explotaciones ganaderas como la que hay de vacas en Sieso o aquí mismo en Angües, allí en Arnillas.
Para poder regar es preciso hacer la Concentración Parcelaria y parece ser que aquellos pueblos del Norte no querían sufrirla por escasez de agua y entonces la Confederación pensó en darla a Vadiello y ante esa situación es cuando esos pueblos reaccionaron y parece ser que están discutiendo las normas de concentración.
He hablado del cura Abellanas ,que fundó a primeros de siglo la Mutua Ganadera,pero además fundó un Sindicato Agrícola en el que en la junta local de Siétamo figuraba como secretario mi padre Manuel Almudévar. Tuvo Mosen Abellanas grandes enemigos, pues sufrió un atentado del que se salvó y se le hizo un homenaje en Graus, pero él siguió postulando en su periódico:"Urge industrializar la agricultura ;se precisa que el agua de los ríos, fuentes y arroyos se convierta en carne mediante la praticultura, en leche, en lana, en queso, en cueros,y sobre todo en lo que vale más que todo eso junto...el pan". Hoy en Sieso se fabrica queso de muy buena calidad y yo subo con cierta frecuencia a comprar este buen alimento y contemplar el paisaje de l aSierra de Guara,
El, como veis luchó por el agua y Joaquín Costa, a quien Angüés tiene dedicada una calle, decía de don Julián Abellanas, que si en España hubiera diez o doce curas como el, ya estaría resuelto el problema del agua; pero cuando murió el 11 de marzo de mil novecientos veintiseis, en Barcelona a los 61 años de edad vino el final del Sindicato Agrícola, de la Caja rural y de las cooperativas fundadas por él. Luego vino la República y después la Guerra, con lo que Angues, Casbas y el Somontano se quedaron sin defensores de sus aguas y sin agua. Cuando tuvieron defensores como Julián Abellanas y tuvieron fe los de Angüés en Joaquín Costa, al que le dedicaron una calle, que parece un recuerdo, lleno de ilusión en la llegada del agua,  debido por el pueblo a Joaquín Costa y un olvido traidor de Zaragoza al Somontano; se espera la llegada del agua ,pero después ya se hablé poco de la misma, cuando tuvieron que ir a buscarla cada día. Porque Angüés tuvo también, además de la riqueza agrícola y ganadera,una fábrica de lejía ,otra de gaseosas y sifones ,una tejería,la fábrica de harinas de Guiral y la industria artesanal. Si hubiera habido agua abundante, esta industria hubiera progresado, habiendo podido subir el agua por medio de la energía eléctrica del río Alcanadre.Pero todavía quedan procedimientos para que no falte agua en la zona de Sieso,,Angües y Torres de Montes,porque me dijo Don Federico Balaguer,que había editado el proyecto de Albasini en la Revista Argensola y le habían recíbido enfadados.Y esa solución de Albasini est  basada en corregir esas depresiones del río,haciendo mas arriba,una pequeña presa en Pedruel y haciendo bajar el agua del río Alcanadre,por Sta. Cilia de Panzano,hasta Calcón, con lo que la poca agua de este pantano se convertiría en la necesaria para regar mayores zonas y !qué se enteren en Huesca!,si hiciera falta se podría derivar agua a Vadiello,con lo que a Huesca,no podría faltarle agua ,como le pasa a Zaragoza que se va a convertir en Zaragón, Huesca en Huesqueta y el Somontano en desierto.

jueves, 14 de marzo de 2019

Compone poesías en la doble Estación de Autobuses y Ferrocarriles.-




Voy con frecuencia a ese Centro de Comunicación de  los  oscenses,  con autobuses, ferrocarriles y en su entrada, con taxis. Al entrar en dicho centro de comunicación de los oscenses con sus puntos de trabajo o con las playas mediterráneas, te encuentras con puestos de periódicos y revistas, que los viajeros que llegan a esta variada estación de comunicación, compran en él, revistas, periódicos o diversos productos para endulzar su viaje por aquellos largos ferrocarriles. Y en esa estación de viajeros, si llegas a ella antes de acelerar la entrada o salida de trenes o autobuses, contemplas y escuchas dialogar a unos funcionarios de ese centro de comunicación, que con la vendedora de prensa y de dulces, se comunican los sucesos que han ocurrido o pronostican los que van a suceder.
Para entrar en esta Estación de Autobuses, ferrocarriles y taxis, encuentras antes de atravesar la puerta principal una fila de taxis, que están en fila, esperando servir a los ciudadanos, que necesiten utilizarlos. Una vez dentro de la Sala de Espera de ambas estaciones, a saber la ferroviaria   y   la   de   autobuses, siempre encuentras personas sentadas en varios bancos, para pasar el tiempo a una buena temperatura y curiosear a los viajeros que sacan sus billetes en las taquillas. Alrededor de esta Sala, se encuentran, además de las taquillas en las que se venden billetes para viajar en autobuses, en el lado derecho, entrando en el gran salón de espera. Frente a dichas taquillas en el otro lado del gran salón se venden los billetes para subir al tren. A su lado  hay  una  oficina,  que  yo  no    qué  objetivo deberá de tener, pero yo sólo sé que esa oficina la ocupa con frecuencia un funcionario, pero que además de cumplir sus obligaciones, es un “Poeta”,  que se llama Pepe García CID.    
 ¿Cómo conocí a este señor  de  tanta  poesía  y  sensibilidad?. Sencillamente entrando por el Sur, por donde bajan muchos viajeros a un nivel inferior a tomar el tren y muchos a un nivel superior,  entran   en el  Bar-Comedor. Muchos son los que comen y beben en aquel comedor tan luminoso y muchos a los que deslumbra a los que se posan en el Bar,  una  luz solar que llena de optimismo a sus espíritus, que penetra en el salón donde toman lo que les apetece. En el Bar adjunto, se toman en el mostrador o en un velador un café o almuerzo apetitoso, que apetece tras una cristalera que además de repartir el Sol por el  interior  del  Bar, invita a contemplar el amplio paisaje, por el que corren los trenes hacia otros puntos a los que van destinados.
Estando sentado y tomando un café en un velador, observaba al señor Don Pepe García Cid, conversando de pie con compañeros de su trabajo y yo me di cuenta de con qué atención, sus compañeros, le escuchaban. Yo sentí deseos de oír hablar al señor CID, con su voz sensata y poética, me levanté de la silla y acudí a entregarle un relato científico, sobre el correr del tren sobre las vías férreas, que dominaban   mis ojos, casi sin poder desviar mi mirada de su marcha sobre ellas. Yo me apuré al darle un escrito relativo a la inteligencia del hombre, dominando su facilidad para avanzar sobre el terreno, con esos aparatos del ferrocarril, que me parecían volar sobre las vías de hierro.  Pero la personalidad de este Cid, “campeador” que  como el Guerrero Castellano, se emocionó de entusiasmo, al leer lo que yo había escrito en el citado artículo, sobre la posibilidad de lanzarse velozmente por las vías férreas.
Yo no quise molestar a sus compañeros de charla y me volví a sentar en la silla, arrimada al velador donde había consumido un “cortado”. Pero este Cid de la pluma, se me acercó y me dijo que antes de marcharme, me  acercara a su oficina.
Así lo hice y este “Cid”, que domina la escritura, me entregó los siguientes versos: “Qué triste es la realidad- al contemplar la identidad ,- en la que no te vales”. El poeta con esa poesía se acordaba de su madre y  reflexionaba  en esos momentos de ella, escribiendo :”Postrada en una silla – o  recluida  en una habitación,-de la que no  sales”. “ En  avanzado deterioro-contemplo tu figura.-Desbordado por esta locura- el alma se me abre´”. “A la mente,  te  llegan  - los recuerdos de otra época, que viviste .” Y al llegar a tu vera-las lágrimas nos ciegan, por revivirte.”
Tu viviste en épocas pasadas y te acuerdas de tu madre cuando, cabalgando en el moderno ferrocarril, vas mirando los enormes cielos que nos cubren, donde más arriba todavía te está mirando tu buena madre, a la que viaja por las alturas y te ve cuando corres sobre el ferrocarril, desde el cielo, por la tierra.


miércoles, 13 de marzo de 2019

Santos Jiménez Jiménez, que es el Rey de los Reyes




Hoy me ha presentado a Santos Jiménez Jiménez, su hijo menor, que tiene delante de sí mismo  a cinco hermanos y a tres hermanas, ocho en total.

Estaba su hijo pequeño mirándose por la valla del Parque, en su parte Norte, a través del cemento y de las enredaderas, que separan la calle del Parque Municipal. Yo, ya adiviné la causa de esas miradas hacia adentro de la porción del Parque Zoológico, en que cuando pasaba por dicha valla, me llamaban la atención los canarios y jilgueros, que en una cabina, cantaban y alegraban a los niños.  Se veía buscar sus alimentos a las gallinas enanas, a otras más voluminosas y  a los pavos reales, que festejaban a sus reinas, también reales, haciendo sus bailes amorosos delante de ellas, en aquel jardín separado del Parque.

Yo, al ver al   gitanico  mirar al interior del Jardín de los habitantes emplumados del Parque, adiviné  porque se estaba mirando ese jardín, que fue  alegre, por que exponía a los ciudadanos,  las alegres vidas de esas bellas y pobres aves.

Le pregunté al  gitanico  por qué se miraba, con tanto interés, a dichas aves emplumadas y él me contestó que se había enterado que estaban acabando con dicha enorme jaula, llena de aves pacíficas,  que unas eran cantoras y otras de gran belleza de su plumaje.

Los gitanos son amantes de la Naturaleza y vi como se sentían tristes por que los querían apartar de la vista y de sus bellos sonidos, parece que dirigidos a los ciudadanos.

El  gitanico me quiso demostrar como el abandono de aquellas aves de bellos colores y armoniosos  cantos no coincidían con el buen gusto de la raza gitana, pues me aproximó a su padre, que estaba sentado en la pared del jardín de las sonoras y bellas aves.

Su padre Santos Jiménez Jiménez, el Rey de los Reyes, me expresó su opinión sobre la belleza de las aves y de su cantar sonoro, porque se sentía unido con ellos, porque también él, amaba la música. Si, y la amaba porque  él también acompañaba a los “cantaores” y a los “bailaores”. Cuando hacía sonar la guitarra, se sentía tan feliz al oír sus sonidos, como cuando escuchaba cantar a las cardelinas y a los canarios del Jardín Municipal. Se sentía feliz cuando tocaba su guitarra, como cuando escuchaba los sonidos de las aves. Santos Jiménez  Jiménez,  al conversar con él, me di cuenta de que tenía los ojos azules y no negros, pero ese defecto de color en los ojos de un gitano, que ha perdido el color negro, no admite importancia. Pero uno se lo explica  al pensar que ya hace muchísimos años que su sangre calé, ya circula por España.

En el cementerio de Huesca, yacen sus padres,  a cuyos restos van a visitar con mucha frecuencia, pues le duele dejarlos abandonados de sus familiares, pues su padre era Juan del Rey y su madre la señora Juana. También visita,  cuando va al Cementerio, las tumbas de sus hermanos Arturo y Alfonso.

Cuando yo voy al camposanto, me fijo en las tumbas de los gitanos, pues parecen  cada una de ellas un pequeño santuario, en el que asoman flores, esculturas de algunos de ellos y otros recuerdos benditos y  que consuelan a los visitantes del viejo dolor de los que murieron hace ya muchos años. Tiene enterrados muchos parientes gitanos, que a pesar de ser lejanos en el tiempo, tuvieron todos ello un corazón cercano. Esos gitanos han sido parientes santos,  pues no se dedicaron a apoderarse de los bienes ajenos. Pues con los siglos que llevan viviendo en España, no se han apoderado de edificios rentables ni de fincas productivas. A pesar de la mala fama que se les puso en otros tiempos, no han tocado nada, si no se ha tratado de algún tomate o de alguna patata, que tenían que coger para calmar su hambre de alimentos, pero sí haciendo fiestas gitanas, cantando sus canciones sentimentales y recitando romanceros familiares y cantando y bailando su folklore gitano.

Yo, como agricultor los he  llamado,  ya hace unos años a ensacar cereales para llevarlos al Servicio Nacional del Trigo y los gitanos han tenido oficios de fabricar, cestas y caracoleras, que ya se acabó esa actividad por la moda moderna.

 Pero sus viejas canciones todavía emocionan al pueblo cuando escucha  cantar “María de la O”, que así dice: “María de la O, qué desgraciadita gitana tu eres teniéndolo “tó”. Te quieres reír y hasta los ojitos los tienes cerrados de tanto sufrir. Maldito parné, que por tu culpita dejé yo al gitano, que fue mí querer. ¡Castigo de Dios!, ¡Castigo de Dios!. Y a la crucecita que llevas a cuestas, María de la O, María de la O.

A Peña Guara (26 de Enero de 1982)

Cañon de Añisclo (Huesca).   Nuestro Pirineo es el más agreste de toda la cadena que también recorre el Sur de Francia, Navarra y Cataluña. ...