Coronel Villalba.
Esta
afirmación la ha pronunciado el Párroco de Chernóbil atribuyendo ser Putin, una posesión del demonio. Y añade que sus
políticos, se encuentran cegados por sus dirigentes, y no ven la sangre de los
rusos y de los hijos de Ucrania. Sin embargo,
ya se escuchan quejas en Rusia
por el horror de la cruel guerra, que su “ Rojo País”, para
conservar la esclavitud está llevando a cabo contra el pueblo ucraniano.
Yo
estoy cerca de cumplir noventa y dos años desde el año 1.930, y que tardó en empezar la
Guerra Civil Española el año de 1.936, en que el “comunismo rojo”, asaltó mi pueblo
de Siétamo, con la intención de gobernar en España, por medio de hombres como Durruti,
que gobernó acomodado en casa Almudévar de Siétamo. Estuvo un tiempo en este
pueblo, pero tuvo que ir a pelear a Madrid. Un general ruso, murió por
proyectiles viajando en coche, por la cuesta de Estrecho Quinto, viajando hacia
Huesca.
Las
primeras tropas, que llegaron a Siétamo estaba dirigidas por Comisarios, que no
pertenecían al Ejército Español de la República sino que querían provocar una
guerra aunque fuera sangrienta.
Y
a orillas del Río Guatizalema estaba sentado un batallón de soldados, tomando
el sol, pero sin intención de avanzar en la conquista del dicho pueblo. Debían
tener normas del Militar, que no se
sabía si era ”franquista o republicano”. Y aquí surge “la controvertida
historia del coronel Villalba Rubio. Combatió de norte a sur para frenar la
sublevación militar y los dos bandos le juzgaron por desleal y traidor. Los
historiadores encuentran argumentos que sostendrían
su papel de quintacolumnista”. Veía con malos ojos el ataque a Siétamo de
ejércitos numerosos sindicalistas, que no querían entrar en guerra, con las
normas que seguían los militares profesionales. El Militar que residía en
Barbastro era de un grado elevado, y no quería dirigir una Guerra que pareciera
una revolución. Para Pardo “el coronel
Villalba, contribuyó con su inacción, sus nefastos planes militares y su
permanente traición de quintacolumnista al fracaso de todas las operaciones
organizadas hasta diciembre de 1.936 para tomar la plaza de Huesca, objetivo
militar de enorme importancia estratégica y moral para la República”. En 1.939
se exiló a Francia y en 1.949,se presentó voluntario en la secretaría de
Justicia de la Capitanía General de Madrid.
George Orwell
En
Siétamo estuvo herido en el Huerto-Hospital, Georges Orwell, qué para juzgar la realidad de esta Guerra,
resultó herido en un intento de apoderarse sirviendo a los “Rojos” para conquistar
la ciudad de Huesca. Georges Orwell
acudió a participar en la conquista de Huesca y resultó herido. Fue trasladado al Huerto-Hospital, que habían
preparado en la entrada a Siétamo. Era Georges Orwell un hombre inglés, que
estuvo en la India, como un colonizador de su Imperio, preocupado por la Libertad
que estaba preparada por organizar la
Libertad en todo el Mundo. Porque lo que le preocupaba era la Libertad de todos
los pueblos del Mundo. El Imperio Inglés iba dando la Libertad a muchos países
del Mundo, cuando Rusia estaba preocupada por poseer el Poder Absoluto del
Comunismo sobre todos los hombres. Y allí en el Huerto a la entrada de Siétamo,
usado para crear un Hospital, al ser herido en la máxima cercanía de Huesca,
fue internado.
Se
salvó su vida de la muerte y marchó a Barcelona, con un gran temor de ser
asesinado por los comunistas. En su lucha por conquistar Huesca salió herido,
pero con un gran trabajo, pudo salir de España. Se había levantado en la
República española, un movimiento del comunismo y se perseguía a personas que
luchaban por la Democracia, como Orwell. Este hombre que llegó a obtener el
Premio Nobel, huyó de España a su tierra
inglesa.
Stalin.
Y Orwel anunció ya hace años que en su obra
:”Rebelión en la Granja” habría una “Rebelión”, pues Orwel, se
acordaba de los hombres sacrificados en
Siétamo, porque él estuvo en el hospital temporal, que hicieron los invasores
de los distintos grupos ateos, durante la Guerra Civil, en la carretera N-240,
a su paso por Siétamo. No se acordaba del sacrificio de heridos por la Guerra,
pero aquellos Médicos, que conocí sentados delante de la iglesia, en
peregrinaciones que hicieron a Siétamo, ya en tiempos de paz, por haber acabado
la Guerra delante del señor Salvador Puig, sentados en el Portal de la iglesia,
no pudieron callar y recordaban con tristes sonrisas, aquellas muertes, que se
produjeron en el Huerto-Hospital. ¡Qué
tristes sonrisas salían del rostros de aquel digno Médico! El era un doctor preocupado por la
salud de los heridos en esa Guerra, en la que se mezcló el Comunismo Ruso y se preocupaba de la salud de los
hombres. Aquel espectáculo de muertes en esa Guerra, lo provocaron los
políticos comunistas extranjeros en el Mapa Triste de España, principalmente
los comunistas, algunos desorientados por extranjeros como ORWEL, que cuando se
dieron cuenta de su lucha a favor de una República, y amenazados con ser
asesinados por los comunistas, que aspiraban
a convertir a España en una República Comunista, desaparecieron de dicha Guerra
Peninsular. Y desde el Hospital
Huerto, de Siétamo, desaparecieron de España por Barcelona. Orwell, con su herida, escribió:
“Lo que he visto en España no me ha hecho un cínico, pero me hace pensar que el
futuro es muy tétrico”. Desde el huerto-hospital de Siétamo, fue enviado a
Barcelona, donde consiguió escapar de la condena de Stalin al POUM. Uno se
acuerda cuando en Siétamo, se podían encontrar por todas partes las tumbas, los
cadáveres y los cementerios. A Orwel le hacía sufrir la crueldad de Stalin, pues él
no gozaba con la muerte de los que luchaban al otro lado del frente, pues narra
como “una noche en el monte de Huesca, a unos ochenta metros de él, vio pasar a un enemigo agarrándose los
pantalones, que parecía se le estaban cayendo y esa situación le hizo recordar
que se trataba de un hombre y no quería dispararle”. Escribió Orwell que no
encontraba en Stalin defensas del obrero, pues afirma “que la política exterior
de Stalin, en vez de diabólicamente lista como se pretende, ha sido sólo
oportunista y necia”.
En
1.937, nos llevaron de Monte Oscuro, “ y nos mandaron junto con las tropas del
POUM a incorporarnos al ejército que asediaba a Huesca”. Tengo muy bien
marcados los recuerdos que tenía a cuatro kilómetros de Huesca, porque esta
ciudad “ brillaba, pequeña y clara, como una ciudad de casa de muñecas.
Orwel
soñaba a Huesca como una Casa de muñecas y el párroco de Chernobil, escribió:
“Putin está endemoniado”. Y Orwell huyó a su patria inglesa, pues ya se daba cuenta de su error
de entrar voluntario en el Ejército de España, cuando ya se consideraba víctima
de la Cruel Rusia Soviética.
El coronel Villalba,
estaba confundido por los sindicalistas, mientras sus tropas estaban inmóviles
a las orillas del río Guatizalema y Orwell huyó por considerarse un esclavo del
Comunismo y ante tanta dificultad,
escapó de España y se fue a Inglaterra.
¡El coronel Villalba no
se sabe si consiguió defender Huesca de
la ocupación por los rojos o fue Huesca
la que se defendió de su ocupación por las tropas Comunistas!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario