miércoles, 31 de agosto de 2022

Me encuentro en el Bar con un supuesto y antiguo judío del Pueblo de Israel.

 

Hoy por la mañana he acudido al Bar de Siétamo y he sido invitado por un señor a tomar un café. Yo he quedado sorprendido de su cultura pues sin preguntarle nada me ha recitado los nombres de los doce hijos de Jacob. Yo que me sé los nombres de dichos profetas a saber: Rubén, Simeón, Levi, Judá, Isacar, Zabulón, Gad, Aser, Neftalí, José, Efraín y Benjamín de entrada en conversación con el Señor. Nos hemos quedado mutuamente sorprendidos por este mutuo conocimiento de las tribus de Israel, nombres de los doce hijos de Jacob de Israel. Entonces Jacob Llamó a sus hijos y les dijo: “Reuníos, y os declararé lo que os ha de acontecer en los Días postreros. Reunís y escuchad, hijos de Jacob; escuchad a vuestro padre Israel:“Rubén, mi primogénito: Tú eres mi fortaleza y el principio de mi vigor; principal en dignidad y principal en poder. Porque fuiste inestable como el agua, no Serás el principal. Porque subiste a la cama de tu padre, y al subir a mi lecho lo profanaste. “Simeón y Leví son hermanos; sus armas son instrumentos de violencia. No participe mi alma en su consejo, ni mi honor se adhiera a su asamblea. Porque en su furor mataron hombres, y en su desenfreno lisiaron bueyes. Maldito sea su furor, porque fue fiero, y su ira, porque fue cruel. Yo los dispersaré en Jacob, y los esparciré en Israel.

Judá,, tus hermanos te Alabarán. Tu mano Estará sobre el cuello de tus enemigos, y los hijos de tu padre se Postrarán ante ti. Eres un cachorro de León, oh Judá; vuelves de cazar, hijo Mío. Se agacha y se recuesta cual León; y como leona, ¿Quién lo Despertará? El cetro no Será quitado de Judá, ni la vara de autoridad de entre sus pies, hasta que venga Siloh; y le Obedecerán los pueblos. Atando a la vid su borriquillo y a la cepa la Cría de su asna, lava en vino su vestidura y en sangre de uvas su manto. Sus ojos Están brillantes por el vino, y sus dientes blancos por la leche. “Zabulón Habitará las costas de los mares. Será puerto de Navíos, y su extremo Llegará hasta Sidón. “Isacar es un asno de fuertes huesos, echado entre dos alforjas. Vio que el lugar de descanso era bueno y que la tierra era placentera, e Inclinó sus hombros para cargar y se Sometió al tributo laboral. Dan Juzgará a su pueblo como una de las tribus de Israel. Dan Será como serpiente junto al camino, como Víbora junto al sendero, que muerde los cascos del caballo de modo que su jinete caiga hacia atrás.
“¡Espero tu Salvación, oh Jehovah! “Gad: Un Batallón lo Atacará; pero él les Atacará por su espalda. “Aser: Sus alimentos son suculentos; él Producirá manjares dignos de un rey. “Neftalí es una venada suelta que tendrá hermosos venaditos. “José es un retoño Fructífero, retoño Fructífero junto a un manantial; sus ramas trepan sobre el muro. Los arqueros le causaron amargura; le fueron hostiles los flecheros. Pero su arco permaneció firme, y sus brazos se hicieron ágiles, por las manos del Fuerte de Jacob; por el nombre del Pastor, la Roca de Israel; por el Dios de tu padre, el cual te Ayudará; y por el Todopoderoso, quien te Bendecirá: con bendiciones del cielo arriba, con bendiciones del océano que se extiende abajo; con bendiciones de los senos y de la matriz. Las bendiciones de tu padre sobrepasan a las de las montañas eternas, y a los deleites de las colinas antiguas. Sean sobre la cabeza de José, sobre la coronilla del Príncipe de sus hermanos. “Benjamín es un lobo rapaz: Por la mañana come la presa, y al atardecer reparte el Botín. ”Todos éstos llegaron a ser las doce tribus de Israel, y esto fue lo que su padre les dijo al bendecirlos; a cada uno lo bendijo con su respectiva Bendición.
Génesis 49:1-28.

Siempre me ha llamado la atención de las abejas, que eran veneradas por aquellos doce hermanos y profetas del pueblo de David. Pero nunca pude olvidar aquel conocimiento y la veneración de aquellos insectos, pero alrededor de la mesa del Bar, me encontré con el supuesto judío del Pueblo de Israel.

¿Por qué escuché de su boca los nombres de los doce hermanos y profetas , cuya sabiduría, coincidió con mi conocimiento de los mismos hermanos’. Tal vez ambos fuimos educados en algún convento, en que se nos enseñó la historia de  aquellos Doce Hermanos.

No lo sé, pero me agradó aquella fe en el antiguo conocimiento por el señor, de aquel pasaje de la Historia Sagrada con el que yo coincidía absolutamente con él.

Al despedirnos quedamos en vernos uno de los días de la misma semana, para conocer mejor  nuestro coincidente conocimiento de aquella historia de antiguos judíos del Pueblo de Israel.

martes, 30 de agosto de 2022

A BENDEMA

 


Yo teneba una biña con un bitau que feba goyo beye-lo. En bi-eba uvas de moristel, alcañón, garnacha y dicha de “ cojòn de gato”. Mi tía Luisa, que yera mui puritana la clamaba de “botón de gato”, porque sonaba más modosa. Cuan la minchabas ,  luciba nos diens como ixos globetes o pompetas chicotas que fan os niños con os grans que s´han escratau. Ixos granos parixeban tocinetes royos y gordos y bellas vegadas lis tiraremos os borfollos royos y gordos y bellas begadas lis tirabanos os borfollos  y pretabamos  aquella polpa dura, mullada de mosto y relucien. Siempre yeranos enderezando o camin dreito ta biña. Bels díyas, cuando beniba cullir bella cesteta d´uvas, eslegidas entre as millors.

Muitos somontaneses portaban un d´istos  presentes u estrenas  a ra chen  d,a capital. Siño Francho levé una zesteta d´ugas ta la casa prenzipcon muita al y, devan a os aponderamientos que feban a tal presenre , espeté  que “Agún en teneba de millions en casa mía, pero que no lis quereba trayer!. De todas as maneras,  quedé bien con sino Franco. Pior estié cuando un coche- línea amanau a ra gran viña, baixaban tos os viacheros y escomencipiaron a minchase as uvas.

Rancaban un rampvelillasallo, y si no yera dulze, la aventaban. Ixo yera una malmetición. A siño Francho de Casa Bailo de Velillas, li doleba más isto que o feito de mincha-ne as uvas. Con muita sorniza s´enfrotiné con toz y a cadagún d´os intrusos, y a os misaches lis deciba : ¿Tamién os mesaches de colegio de pago, van a minchar ugas ta viña d’otri?. Dimpués se concaraba con as mullers y lis deciba:¿también as madamas van a minchar uvas ta viña d’otri?. Y en zagueras li dizié  a un mosen: “También a dotrina cristiana diz que os siñors mosens baigan a minchar ugas ta viña d’otri ¿. Debán de tals reflexions y un comportamiento tan modoso, os siñors Biacheros, puyaron ta o Coche de línea, con a coda entre as garras, pa dixar tranquilo a su amo.

¡Qué bien yeran os jarmientos n’a jarmentera!. Baixaban as mullers culli- ne un faxo y feban una chera n’o fogaril; se minchaban tostadas,arruxiadas con o bino de casa y a viella contaba o cuento de María Jarmiento, que se fue a cagar y la se llevó o viento.

A vendema yera un rito; os homes, muliers y niños,toz yeran poquez pa recullir as ugas, carria-las n’os cuebanos y cobanetas y pisalas n´os cubos. S’escurriba o mosto, que cayeba  n’o laco, lo meteban en redomas, lo cogeban pa que no fermentase y feban mostillo con almendras, untar pan.

Como en quedan poquetas de biñas entre cazataires,cans y rabosas que dixan as barrazas sin grano y lis aduyan as perdices y os pasajantes, no en trayén cuenta de cautivar una biña. Yo la he rancau.

Agora a beber o vino de polvo, yo en cuenta de mostillo, tomaré jarabe balsámico pa limpiar os livianos del humo dós coches y d’o fumo d’os cigarros.

lunes, 29 de agosto de 2022

Poesia de Luis mi nieto.

  


 

A veces me siento como un pintor

El cual camina por una senda

en busca de un reto a su altura

Esta se le presenta en forma de paisaje

Y allí él pone el lienzo y empieza a pintar

El coloca sus saberes en la paleta

Que al mezclarlos dan lugar a una idea

Con ella pinta en el lienzo blanco de la vida

Brocha a brocha culmina otra experiencia

Y entonces pone el cuadro en la galería

La cual es su legado e historia

Y vuelve a la senda en busca de retos

Que se van haciendo mas grandes

A medida que la galería se llena de experiencia

Y esas experiencias le dan más saberes

Hasta que la galería da igual conocimiento

Llena o vacia fea o bonita se cierra.


“Estaba mi nieto Luis en el jardín de la piscina y en aquel observar el sol brillando en las aguas que bañan a sus compañeros que bajo los rayos del sol, del agua limpia de la piscina. Luis al ver aquellas aguas puras y a sus primos y primas bañarse en ellas, se sienta en un banco de la sombra  de unos árboles litoneros y medita en la labor con que regará la lluvia el viento.”

El autor es como el viento

 

 Yo soy un lobo hambriento y sediento

Mirando con deseo tus hermosos labios

Pensando si podrán calmar su apetito

Pero sin previo aviso el viento cambia de rumbo

Y soy una oveja miedosa sola y perdida

Que no le queda otra que esperar a su pastora

¿Por qué sin tí no hago más que encallar?

Yo cual gran almirante amo y señor del Mar

Pero a merced del implacable viento del amor

 Mueve su navio rumbo a estribor y a babor

Pero le puede arrastrar hasta el dolor

el está solo y perdido en un océano inmenso y destructor

Hasta que te ves en una hermosa estrella

Que lucha contra la inmensa obscuridad

Y me guías por los mares con tus brillantes virtudes.

domingo, 28 de agosto de 2022

El humor de Antonio Bescós en la Guerra Civil

 



Cuando veo y recuerdo aquellas ruinas y aquellos cadáveres sin enterrar todavía en los caminos y en el monte de Siétamo, me pregunto ¿cómo podrían sus hijos volver a levantarse para que el pueblo resucitara?. Antoñito del Herrero  cogía, con los demás niños, los balines que por el suelo repartieron los fusiles de unos y de otros. Antonio Bescós, al que todo el mundo  trataba de “Trabuco”,  cuando volvió desde su condición de prisionero a la vida civil, tenía que ir a trabajar unas veces en Huesca, a donde llegaba caminando y más tarde en Siétamo, en Regiones Devastadas. Pero nunca perdió el humor, que le prolongó su vida y le dio periodos felices con su matrimonio y con su hijo. Encontré entre mis papeles uno que al leerlo me recordó que fue Antonio Bescós el que un día cualquiera me lo dictó. Narra la letra de esa canción la derrota de unos milicianos, huyendo desde España hasta Francia y mezcla el sufrimiento que tuvo que pasar con sus compañeros, con notas de humor que le hicieron posible superar esos días de horror. Antonio, al dictarme su canción,  la cantaba y se expresaba así: ”Somos los tristes refugiados-que a este campo venimos- de tanto andar, hemos pasado la frontera-con nuestro ajuar, mantas, macutos y otras yerbas.-Un poquito de humor hemos salvado- de luchar contra el fascio invasor- y en la Playa de Argelés Sumer- nos fuimos a encerrar para comer”. Después se acuerda de lo bien que lo pasaba en España, diciendo: ” Y hoy pienso que hace sólo tres años,-España era una nación feliz, libre y obrera,- abundaba la comida, no digamos la bebida, el tabaco y el papel,-había muchas diversiones, la paz en los corazones y señoritas a granel”. Pero después de soñar con su feliz pasado, sigue diciendo: “Hoy, que ni cagar podemos sin que venga un mojamé- y nos trate como a presos y nos grite a los soldados: allez, allez, allez. Y sigue describiendo los horrores que tenían que pasar él y sus compañeros, diciendo: ”Vientos,  ladrones de maletas, arena y mal olor-sarna en los barracones y fiebre y dolor.-Colas para buscar dos litros de agua,-de leña y de carbón,- alambradas para tropezar buscando tu “chalet”- y por todas partes por donde vas- te gritan por detrás:¡ allez, allez, allez!”.Tuvo suerte Antonio, pues  un tío suyo General del Ejército,lo liberó de seguir siendo un prisionero, como lo fue en Francia. Es que era una persona inquieta por la religión, ya  que si hubiera tenido dineros para estudiar, se hubiera consagrado sacerdote. Tenía también un humor extraordinario, pues en cierta ocasión, cuando trabajaba en Regiones Devastadas en la Iglesia de Siétamo, se subió al púlpito y empezó a predicar a sus compañeros, diciendo: “ ¡Oh amigos míos, tenemos que estar contentos porque este trabajo no nos apura y así como mi compañero en la escuela José María Javierre, subirá en el escalafón  eclesiástico,  yo ya he alcanzado el grado de sacristán!”.En esas estaba, cuando llegó el cura de Torres de Montes, que lo apeó rápidamente de tan alta tribuna. Pero ese incidente  no le rompió su vocación. Y a pesar de que el cura del pueblo le quiso cobrar un duro por el entierro de su padre, él colaboró gratis en todos los  entierros de su pueblo. Así  que todos, se acordaban de él desde allá  arriba. Cuando a Don José María Javierre lo proclamaron Cardenal, fuimos a Roma muchos sietamenses, entre los que naturalmente se encontraba Antonio Bescós. Tenía ganas de visitar la tumba de San Lorenzo, al que tantas veces había acompañado en la procesión, en Huesca, y tenía necesidad de saludar a su  compañero de escuela, que iba a ser cardenal. Al encontrarse en Roma con él,  impulsado por su buen humor, le dijo: “Monseñor, delante de vuecencia, se encuentra,  aunque sin “naveta” ( como llamaban al  incensario), el sacristán de la parroquia donde fue bautizado”. A continuación se abrazaron cardenal con sacristán y éste le dio dos cajas de castañas de mazapán. Al poco tiempo llegó a la iglesia de Siétamo, desde Roma,  una hermosa casulla roja. El humor de Trabuco compartido por todos los sietamenses, empezó a  redimir a Siétamo.

viernes, 26 de agosto de 2022

Costa y el agua


Pantano de El Grado (Huesca).


¿Qué decir sobre el agua en esta tierra abundosa en ella que hace que el Ebro en el verano, siga siendo el río Ebro?.

Está ya todo dicho sobre el agua en una tierra que vió nacer a su profeta, que “alumbró la fuente de las aguas vivas en el desierto estéril”. Lo dijo Joaquín Costa y siguiendo su doctrina, La Violada, La Litera y Los Monegros en alguna de sus zonas, no son ya estériles desiertos pero la capital de la provincia, venero de las aguas, no ha redimido todavía su comarca, la que otrora fuera Plana y hoy conocemos por Hoya.

Tenemos los oscenses, yo diría, un pequeño patriotismo que nos lleva a proclamarnos “pistonudos”, al tiempo que vemos como la Hoya se despuebla, mientras su capital se medio estanca y mira como se marchan las aguas, por canales, a hacer fecundas otras tierras.

No es cuestión de vísceras ni de proclamas vanas; lo que es preciso es que ese fuego encienda los cerebros con fines de progreso. El “piros” o fuego de Pirene ardía en el cerebro del profeta con llamas en forma de preguntas: ¿despensa?, ¿escuela?, ¿higiene? y para contestarlas o apagarlas, sólo veía el agua.



Le surgían las visiones de la Mora, de aquella que sale de las aguas de la Basa, la noche de San Juan, desprendiendo cual perlas, de su figura deslumbrante, las gotas vivíficas que embellecen con raros rododendros su entorno encantador.

La Andramaría, diosa fecunda de los vascos tiene su templo natural en los prados de Ansó (Ansola, Ansoain, Ansoátegui, Ansorena), a los que torna verdes y se lleva a Navarra las aguas del río Aragón.

Igual que en el mar Rojo las aguas se abrieron y cerraron; en el Alto Aragón se abrieron hacia el Ebro, hacia Cesaraugusta, a los secos Monegros, a Lleyda y a Navarra y quedaron cerradas a la Hoya de la ciudad de Huesca.

He preguntado los motivos a los sabios ilustres para que me iluminen y me han dicho que si Navarra se reservó el río Iratí, que Lleyda negó el Segre a la ciudad de Barcelona y Zaragoza, no saben si por ser Augusta, ha reducido nuestro Aragón al Ebro.

Y en Huesca, ¿qué se hacía?, despreciar al “ta pueblo” y llevarse sus aguas como el pez poderoso engulle al más pequeño, en tanto rodeaba como en vulgar corte provinciana a foranos ilustres, que venían del Centro, comían langostinos y como la boca la tenían llena, culiparlaban rascándose la tripa satisfecha y, en tanto, abandonaban la idea del profeta que en Huesca fue cochero, trabajó de albañil y se vio rehusado por ilustre familia al pretender casarse con su hija.

Y siguen todavía, los culiparlantes en la opinión de que Huesqueta es mejor que siga siendo un pueblo burocrático y apagado.

Hay que encender la llama del progreso porque los viejos mitos ya pasaron y es necesario que creemos otros hitos o mojones que nos marquen las cotas por las que pase hacia la Hoya su Canal.

Han de abrazarse las aguas del Gállego que viene de las Galias con las del Flumen, el río que en el mundo entero posee el nombre más latino.

Cantó Camila Gracia el día del abrazo de Tardienta y desde arriba está esperando que se abracen, y creo que no en vano, el Flumen y el Gállego,

Costa cantaba una nueva Litera y hacía hablar al río Esera que decía: ”Recogedme, no seáis ciegos…ni cobardes …recoged a mi compañero el río Ara; recoged a nuestro hijo común el río Cinca y visionario seguía, ”Las aldeas ascenderán a categoría de villas; las villas se harán ciudades; Barbastro se convertirá en una pequeña Zaragoza y Monzón adquirirá las proporciones de Lérida…Binéfar, Tamarite, Almacellas, Fraga, La Almunia, San Esteban y otra multitud de poblaciones, ahora rústicas y terrosas, rivalizarán en riqueza con las más opulentas de Cataluña”.

Se quieren llevar el Ebro desde Cataluña, pero los altoaragoneses, deben aprovechar, como dijo Costa todas las aguas, que nacen en sus tierras y así habla “de otra multitud de poblaciones, ahora rústicas y terrosas, rivalizarán en riqueza con las más opulentas de Cataluña”. Ya vemos como en el Este de la provincia se extienden los riegos y en el Sur y en el Oeste, pero en la Hoya Somontano de Huesca, vemos pasar el agua de nuestro ríos y no la catamos, porque “han de abrazarse las aguas del Gállego… con las del Flumen” y han de regar con las aguas del río Flumen y las del Guatizalema, reforzadas sus corrientes con las aguas del Alcanadre, como propuso Albasini, a través del Pantano de Calcón y de Vadiello, Angüés, Siétamo y otros pueblos de la zona, que podrán reforzar el riego de la Hoya, pero sin perder el Somontano sus aguas y sus ríos, como no los perdieron ni Navarra, ni Lérida.

Hay quien dice que el agua beneficia únicamente a los agricultores, pero el Profeta hablaba de “los saltos de agua fábricas de harinas, de tejidos y conservas… y las frutas que han de afluir a ellas en río continuo para la exportación”.

¡Qué razón tenía Costa!, si observamos como los mayores países agrícolas, son los mayores en industria. Habla también de trenes que llevarán las mercancías y cita a una locomotora avergonzada que lanza sus silbidos como una burla contra nuestra desidia y fanatismo musulmanes. ¡Como veía Costa el tren de Canfranc y el ferrocarril nuevo que propuso el ingeniero Arenas!.

Pero quedan en Huesca seguidores de Costa que luchan entusiastas por el Canal que regará el Somontano y la Hoya y exhiben su pancarta permanentemente en esa plaza porticada que como nombre tiene el de un ilustre oscense, el de López Allué, que amó nuestras costumbres y que, de estar entre nosotros todavía, se uniría gozoso a todos los oscenses, para regar Barluenga, Loporzano y Siétamo con el Pantano de Montearagón, para dar ese paso hacia una Huesca que avance hacia el progreso y grite: "Es mía el Alba de Oro”.

El bien y el mal, los ángeles y los diablos



La noche del Domingo, día 29 de julio, ha resultado impresionante para los vecinos de Siétamo, porque les han hecho recordar aquellas otras noches de San Fabián y San Sebastián, en que se encendían en la Plaza Mayor y en otras calles, hogueras, a cuyo alrededor se juntaban hombres, mujeres y niños. Los mozos saltaban por encima de la leña ardiente, a través de las altas llamas. Cuando esas llamas, bajaban su impulso, aumentaban las brasas, y sobre ellas  pasaban, pisándolas, jóvenes descalzos y sin quemarse. Y todos los asistentes al homenaje a los Santos San Fabián y San Sebastián, llenos de devoción hacia aquellos a los que pedían auxilio contra el fuego, gritaban a la luz de la luna: ¡Viva San Fabián y San Sebastián!, prolongando su grito entusiasmado. Eran aquellas hogueras una representación de la lucha entre el Bien y el Mal. Los Santos Fabián y San Sebastián eran representantes del Bien y las llamas y  las  brasas de las hogueras, eran la armas que los diablos empleaban para apoderarse del Poder Divino. Ganaba, después de tan dura lucha, el Bien, porque aquellos jóvenes, se lanzaban entusiasmados a través de las llamas y pisaban, sin quemarse, las brasas, hasta que desaparecían apagadas en el suelo.
Pero  hoy, he recibido una fuerte impresión, que ha deshecho en mí, aquel ambiente tan activo pero pacífico y me ha llevado a que en mis vísceras y en mi cerebro, se crease una sensación de inquietud. ¿Quien ha producido en mí tal sensación?. Han sido “Os Diaples d’a Uerba”, diablos o mejor dicho muchachos inocentes vestidos de diablos y creadores de fuego, del que entienden más que los antiguos mozos devotos de San Fabián  y de San Sebastián, porque en el Infierno el fuego es eterno y no se consume. Esta asociación  de   ”Os Diaples”, tiene su sede en Zaragoza y va por los pueblos con sus técnicas pirotécnicas, levantando fuego por las calles y plazas y sonando música con dulzainas y ruidos producidos golpeando los tan-tanes, que hacen bailar brujas, diablos y otras bestias.
El fuego lo  han  proclamado un símbolo en todas partes, porque tiene un origen remoto y al mismo tiempo extraño. El color del fuego es ordinariamente rojizo, pero los diablos le dan un extraño color plateado, que lo hace más distribuidor de miedo, de inquietud y de nerviosismo. Hace imaginar a la gente un mundo de Quimeras, como el fuego purificador del Purgatorio o el fuego castigador del Infierno.
A las doce, en punto, de la noche se apagaron las farolas que iluminaban las calles y las plazas y aquellos fuegos que encendían los “diaples”, hacían respirar humo que ahogaba a los hombres, a las mujeres y a los niños,  el repique de tambores creaba un ambiente ensordecedor y las olas de chispas que caían sobre los espectadores, les hacían sufrir un gran temor de quemarse. El arder de la pólvora y y el ruido inaguantable, disminuían escasamente, porque por encina del Ayuntamiento brillaba la luna, que daba un poco de luz y de esperanza al pueblo, que estaba siendo conquistado de un modo salvaje por el Mal.
En Siétamo se representó el triunfo de ese Mal, cuando en los dances antiguos, que se bailaban en las  Fiestas y en las Ermitas, siempre había una lucha entre el Bien  el Mal. Por ejemplo en el Dance de  Sariñena,  se representa la lucha entre moros y cristianos, pero sobre todo la lucha entre el Angel y el Demonio, por medio de expresiones artísticas propias del Teatro. El Bien está representado por San Antolín y los representan los Angeles y el Mal por el Demonio. Al fin triunfa el Bien y los hijos de Sariñena  se llenan de alegría, aspirando el olor de la albahaca y el sabor del melocotón con vino.
En Cataluña son innumerables los Bailes de los Diablos y en Aragón se venera a San Miguel, que dirige a los ángeles del Bien contra los demonios del Mal,  gobernados por Lucifer. En Aragón y Cataluña en el año 1150, en el banquete que se celebró para la boda del Conde de Barcelona, Ramón Berenguer IV con la hija de Ramiro el Monje, Rey de Aragón, a saber Doña Petronila, se representó una batalla entre el Bien y el Mal. Los buenos estaban dirigidos por el Arcángel San Miguel y los malos por Lucifer. Allí se veían luchar los ángeles contra los demonios. En el Carnaval aparecen las peleas entre el Bien y el Mal y en unos lugares parecen gobernar los demonios y en otros los ángeles. Pero en Siétamo fue el triunfo del Mal el que ganó la batalla, donde más bien no hubo tal pelea, porque no apareció ningún Angel, para defender el Bien. Era muy abundante el número de diaples, desde uno de sus jefes, de una altura enorme, que debía ser, sin duda “El Gran Cabrón”. Otro de sus jefes, montaba un carro del que tiraban diablillos y vomitaba fuego por sus fauces y los demás recogían llamas que repartían por el centro de la Plaza, en tanto otros se las pasaban por sus rostros al espantado pueblo. Danzaban  y saltaban por una cuerda ardiente, que batían dos de sus malditos compañeros y  ”lauburus pintados en el suelo con petróleo, desaparecían por  obra del fuego, del suelo maldecido de la Plaza. Ya, al final se colocaron todos los  diaples,  alrededor del “Gran Cabrón”, formando como un altar sagrado del Mal, que ardió terriblemente,  creando el miedo y el terror entre las personas mayores y los niños. Cuando se acabó la representación del Mal, se encendieron las luces y la gente respiró con placer,  como si le hubiesen devuelto la paz, que produce el Bien.¿Quisieron los artistas que crearon esta obra teatral hacer ver al pueblo que el Mal, no lo hacían sólo los demonios, sino que ahora, han surgido unos nuevos personajes diabólicos, que en lugar de vestirse con vestidos antiguos  y exhibiendo unos cuernos amenazadores, van vestidos de burócratas y de políticos?.  En aquellos viejos tiempos estas luchas entre el Bien y el Mal, servían de crítica en muchas ocasiones a los gobernantes políticos de muchos Ayuntamientos y ahora, en pleno siglo XXI, ¿no será esta representación de un triunfo del Mal, sin oposición de los Angeles del Bien, una “Crítica” de la pérdida por el Bien, del bienestar y del progreso social, que iba adquiriendo esta sociedad?. Porque, acompañada de juramentos, la gente lanza su maldición contra la ruina que nos ha invadido,  en  tanto  esos diabólicos políticos adoraban y siguen adorando el dinero, que han hecho desaparecer para que  los hijos del pueblo, puedan comer.

jueves, 25 de agosto de 2022

El carretero de Almudévar.-

 


El día 10 del húmedo mes de Abril del año 2.002, mi consuegro Rafael me llevó a ver a un antiguo fabricante de carros de Almudévar, que tiene sus orígenes en  Chimillas, de donde salió su abuelo llamado José Latorre Pallás, que se casó con doña Emilia Atarés Val, de casa Mola de la Villa de Almudévar, para dar a sus descendientes el carácter de Saputos o Sabios no en ciencias abstractas, sino en el manejo de la madera, con la que se dedicaron a montar carros, galeras, volquetes o “vulquetes”, como los llamamos en nuestra Fabla, pero entre estos carros los había como portadores de cubos de agua. No es extraño este detalle de ir a buscar agua, porque Almudévar siempre soñó con este elemento, ya que según dice Braulio Fonz en su magnífica obra “Vida de Pedro Saputo”, en esta Villa había muy pocas fuentes y ningún río, lo que hacía que el agua fuera escasa, tanto que no podían moler con molinos, que se levantan a orillas de los ríos, sino con molinos de viento.
Y ¿qué madera emplearían los fabricantes de aquellos molinos, de los que por desgracia, ya no queda  ninguno?. Supongo que la misma que usaron los carreteros para hacer las galeras y carros, pues como me dijo mi amigo José María Latorre, ya que por amigo lo tuve enseguida, por descubrir en su personalidad en escasos minutos de trato a un señor amigo, sabio o saputo y generoso, que la madera que empleaba era toda procedente de la comarca y comprobó sus palabras al mostrarme un eje de carro del siglo XVI, que es de carrasca y en ella misma están escritos los números romanos. Ese eje le salió al tirar una ventana. Conserva el brillo del roce de los cubos de las ruedas y una fortaleza casi metálica, y este eje que debe entrar cuando José María   desaparezca  de este mundo, en el que ha de vivir tantos años como su buena madre, la señora Eugenia, que ya tiene en estas fechas noventa y ocho, en el Museo Histórico de Almudévar, que se ha de hacer o preparar en uno de esos molinos de viento , que hay que recuperar, como se están recuperando las antiguas bodegas de la Corona y las de las Crucetas.
Han llegado unos tiempos en los que ya no se fabrican carros, sino automóviles, pero José María que ya está cobrando el retiro de aquellas nobles tareas, sigue trabajando la madera y uno se llena de emoción, al entrar en el patio de su casa, paso precedido por el caminar por el antiguo corral, hoy más bien jardín, donde están plantados un laurel, unas cepas trepadoras y unos rosales. Esas oliveras le recuerdan los viejos tiempos en que alguna vez acudía a coger olivas, para gastar aceite durante todo el año, en unión de sus familiares y ¡por qué no decirlo!, para alimentar los candiles con que se alumbraban los carreteros en sus talleres, en las horas que se llevaban la luz, o por las noches cuando esta luz escaseaba.
Estamos ya en el patio y vemos las puertas que en él se encuentran para dar acceso a otros locales, en los que en tiempos, en algunos de ellos, se encontrarían las cuadras y esas puertas de madera de pino de Huesca, labradas con viejos adornos, imitados de otros que todavía eran más antiguos y estas puertas tenían unas cerraduras , con picaportes ingeniosos, hechos a forja. En los lados del patio se encontraba un banco enorme, que  me  recordó  las cadieras que todavía yo conservo en mi pueblo, junto al hogar o  fogar  de mi casa ( Casa Almudévar). Tiene las esquinas o ángulos del techo adornados con madrera labrada y al subir por la escalera, en los lados, hasta las paredes están cubiertas por bello maderamen.
Y José María me invita a subir y me encuentro en un recibidor, presidido por un reloj de pared, como aquel que cantábamos de niños y que decía: “ mi  abuelito tenía un reloj de pared que compró cuando él nació, pero un día el reloj de tan viejo se paró y con él, mi abuelito se murió”. Y es que estos relojes no  traen  más que recuerdos, al mirarlos, porque su esfera y su péndulo están llenos de imágenes troqueladas y pintadas con jarrones y flores, que encienden los espíritus de estética o de belleza, como todos los objetos que José María fabrica.
 Y, al decir esto no puedo menos que acordarme de Antonio Bello, al leer lo que escribía:
“cuando empezaba a estar preocupado con la naturaleza del arte…creí ver la respuesta a este interrogante”.  Se trataba de una tribu de robustos salvajes en  una  danza….sólo bailaban de un modo frenético, al son de tambores incansables…Era el esfuerzo tan duro que aquellos hombres robustos…que por fin caían   exhaustos,  rendidos”. Y en estas palabras comprendí como José María entró en el arte, porque “Todo el enorme mundo del arte…tiene de común con la danza…el huir del trabajo como servidumbre… Puede  exhibirse  el  arte como una rebelión auténticamente humana : una reacción del hombre”. Y en el caso de los danzantes la reacción   tenía   lugar  contra el trabajo en las continuas expediciones de caza ,que les hacía buscar el arte y el descanso en la danza. En este caso de José María,  que  a  sus numerosos años de rudo trabajo con maderas duras como la carrasca, le ha nacido una danza del arte, que lo hace feliz. Si y lo hace feliz, porque también él hace felices a los hijos de su Villa, Almudévar, fabricándoles cientos de almudes, que son como “objetos parlantes” de su noble  escudo  y  del mío, pues acudí a la carretería a comprar otro nuevo, aunque tengo varios de los que se fabricaban en mi casa.
Y en el recibidor, presidido por el reloj de pared, se encuentra otro hermoso banco en el que apetece sentarse, para contemplar la tan trabajada caja o ménsula de madera de dos pisos, sobre el que reposa un hermoso y supongo que hace años, apagado brasero, pero que hace arder de entusiasmo artístico a José María.
Y por fin, nos introdujo en un gran salón-comedor, con una enorme mesa, frente a la cual se encontraba en la pared, una capilla ocupada por San Roque, con un mordisco o “mueso” de perro en la rodilla y el propio perro de como acompañante del santo. Pero  en  este comedor había multitud de obras de arte, que yo estando,  ya casi saturado de belleza, no puedo recordarlas todas.
Además estaba admirando tanto a San Roque, que José  María  abrió la puerta de la capilla y sacó un libro de cuentas  de aquellos que usaban en su taller, y hacía ya años y al mirarlo, vi una cuenta que ponía,  por celebrar una misa…tanto, por cantar en el coro…  tanto y así sucesivamente, lo cual me causó una impresión que me llenó de entusiasmo y de admiración por un taller y unos artesanos tan trabajadores y tan enamorados de la iglesia y de sus santos. Entonces me fijé, de repente, en dos iglesias de Almudévar, de una altura considerable, que José María había convertido en  dos  recuerdos de madera. ¡Impresionantes!.

martes, 23 de agosto de 2022

Negros de cuerpo y negros de alma

 


Estuvo García Lorca los años 1929-1930, como estudiante en la Universidad de Columbia, situada en Nueva York. Y yo venía al mundo el año de 1930, a Siétamo, junto al río Guatizalema y cuando me llevaron, a mis cinco años a la finca de Las Valles, para ver a los segadores, la luna rielaba en sus aguas  y “alzaba en blando movimiento, olas de plata y azul”, como  se expresa Esponceda en su poesía. Pero la luna mostraba no sólo las olas de plata y azul, sino que “hacía brillar el horizonte y el cielo estaba azul”. Y así como Federico García Lorca estuvo en la  Columbia University de Nueva York, el año de 1930 y escribió su obra “Poeta en Nueva York”, yo nacía.  Y al llegar a ver la siega en el mes de julio de 1936, visitando el Campo de Las Valles de Siétamo, “la tierra que pisaba, aparecía con los campos amarillos” y “cacé un insecto verde y lo guardé, envuelto en mi pañuelo”. ”Volví a abrirlo y vi el insecto, que impregnaba el color verde en mi pañuelo”.
Y llegado el mes de Julio de 1936, nos esperaba el cambio del color verde del campo y del insecto por el rojo y el azul, en tanto a Federico García Lorca, lo  esperaba la muerte por tiros de fusil, la mañana del 18 o del 19 de Agosto de tal año, en el barranco de Viznar en Granada, para que olvidara los recuerdos grises de los hombres negros, nacidos en los barrios de Nueva York, que veían correr sobre la basura, las ratas, y carecer de la visión por los niños negros de los gorriones, por las mañanas. En esos enormes núcleos urbanos de Nueva York, abundan los vecinos de casas sucias y viejas. A lo lejos les surgen rascacielos y grúas potentes y el cielo sobre esta ciudad es obscuro. Y yo quedé absorto ante el color verde del insecto, que recogí y así como a mí, me repugnaba el color verde,  Federico le cantaba a tal color: “Verde, que te quiero, verde – Verde viento, Verdes ramas.- El barco sobre la mar-Y el caballo en la montaña.- Ella sueña en su baranda,-Verde carne, pelo verde,-Con ojos de fría plata.- Verde que te quiero verde”.
 ¿Federico García Lorca identificaba el color verde con la verde “libertad sin ira”, que esperaba que llegara a los negros de esos núcleos urbanos?. Tal vez trataba de guardar su miedo en espera de la libertad de esos modernos esclavos, que en el siglo XX,  componían “un canto angustiante, con ecos de denuncia social, contra la civilización urbana y la mecanización de hoy”.
En Siétamo, al aparecer la “sangre verde” del insecto, daba la impresión de que se iba a perder el color también verde de los cereales, para dar lugar al amarillo de la mies  y otro color, que era “el verde rama”, del que escribe Federico. Ese verde de los cereales  se extendió por la finca “Las Valles”, pero otros dos colores quisieron destruirse mutuamente, y habiendo  llegado el tiempo de la trilla, es decir el mes de Julio, en que se pierde el color verde, esos dos colores, el rojo y el azul aparecieron, al desaparecer el verde de los campos, en el mes de Julio de 1936.
Los hombres de color rojo luchaban contra los hombres de color azul.
“Muchos de “los rojos” gritaban a todos los hombres: ¡Rojos, os  quiero rojos!. Otros gritaban a  los hombres que con ellos convivían :¡ Azules quiero que seáis!. 
El rojo acechaba al azul y el azul al rojo y se creó una Guerra Civil endiablada entre unos hombres que eran gobernados por los rojos y otros que lo eran por los azules.
Y los azules fusilaron a Federico García Lorca, en tanto que los rojos, hicieron lo mismo con “El Padre Jesús”, que es conocido por una fotografía que le sacó un fotógrafo judío europeo, llamado Hans Gutman, en el lugar de su fusilamiento. Después se nacionalizó español y pasó a llamarse Juan Guzmán. Después de leer el libro de Don Damián Peñart y Peñart “La Diocesis de Huesca y la guerra de 1936-1939”, se impone  que el “Padre Jesús” era el sacerdote, ordenado el 6 de Junio de 1936 y nacido en Alquézar, llamado Antonio Vilellas Juste.  
Los colores se organizan en un Arco-Iris y evitan el reñir unos contra otros, y con su belleza hacen agradable el mundo y muestran la Paz al Mundo. En cambio los rojos y los azules se amenazaban y entraron en una lucha sangrienta entre distintos colores políticos.
 Federico García Lorca, que no pertenecía a ningún Partido Político fue  considerado como un enemigo, por los jefes de otro Partido Autoritario y la mañana del día 18 ó 19 de Agosto del año de 1936, lo fusilaron en el Barranco de Viznar, en Granada.
El “Padre Jesús”, a los veinticuatro años de edad fue fusilado, cuando hacía aproximadamente un mes que había sido ordenado  sacerdote.
Esa fotografía parece representar “Un minuto antes de ver a Dios”, al sacerdote, que se daba cuenta  de la presencia del Señor, pues recuerda ver a Jesús con sus ropas humildes, sus cabellos alterados, su barba, que no se podría afeitar por carecer de instrumentos para ello. Lleva los brazos hacia atrás, lo que da la impresión de que sus muñecas irían atadas, lo que no le ponía cara de tristeza, sino que la carretera en su “miliar Séptimo” le hacía recordar los siete pecados capitales de aquellos que lo iban a fusilar, pues en su cara no se veían síntomas de soberbia ni de avaricia, ni de lujuria, mi de ira, ni de envidia y ni siquiera de pereza y la cara es el espejo del alma”.
Así como los siete colores del Arco-Iris, son distintos pero están unidos, los colores políticos  se odian y luchan entre sí, pero Federico García Lorca, amaba todos los colores, porque su amor a los hombres, era capaz de respetar el comunismo, la monarquía y la anarquía, tratando de hacerlos compatibles con el catolicismo. El no comprendía el odio ni la guerra entre los hombres. El desde niño amaba a Cristo impulsado por el Corpus granadino y más tarde por el Corpus toledano y se preocupaba de los pensamientos y sentimientos líricos y etílicos.
El periodista Alfredo Amestoy, escribió en el ABC del día 4 d Junio de 2015, en su artículo “El último “Corpus” de García Lorca, las opiniones del oscense Bello. Y escribe: “Pepín Bello, otro miembro de la Residencia y de la Orden de Toledo, es el que consideró a Federico “el poeta místico del siglo XX”. Bello conoció mejor que nadie a García Lorca. Y Bello fue el que recibió, y luego puso en manos del Primado toledano la carta desde Nueva York donde le cuenta que “hoy he salido dando vivas al portentoso, bellísimo catolicismo español… Ahora comprendo el espectáculo fervoroso, único en el mundo, que es una misa de España. La lentitud, la grandeza, el adorno del altar, la cordialidad en la adoración del Sacramento, el culto a la Virgen son en España de una enorme poesía”.
Bello, en defensa del “misticismo” lorquiano, escribe, escribe que “se ha querido desconocer la angustia de la Fe que latía en la profundidad de Federico y que dejaba asomar sin ninguna prevención”.    
El día del Corpus, Federico se quiere marchar de Madrid y tomando un taxi en la Gran Vía, le llamó la atención la presencia de dos mujeres jóvenes. Entonces mandó al taxista parar el coche y dirigiéndose a ellas, les ofreció llevarlas al lugar que era su destino. A Federico le llamó la atención una pequeña maleta. Picado por la curiosidad les dijo: “¿y para que llevan ustedes una máquina de escribir?”. Y dominadas por la bondad de aquel señor que las llevaba a su punto de destino, le dijeron: “Aquí llevamos al Señor”. Y el periodista, “sin dudarlo un instante, conturbado, Federico se pone de rodillas en el taxi y se santigua, como lo hacía desde niño siempre que se cruzaba en la calle con el Viático”.
El “Padre Jesús” fue fotografiado en el momento en que iba a ser fusilado y el fotógrafo judío, mandó su foto a un Cardenal y Federico, pocos días antes de su muerte, fue despedido por el Señor.
No se han encontrado los restos mortales de ninguno de los dos amigos de Jesús, pero setenta y nueve años después de su fusilamiento nos acordamos de Federico y del “Padre Jesús”. 

La sequía por falta de lluvia y de hombres


 
Cuando estos días del mes de Agosto, circula uno por las carreteras del Somontano o de la Tierra Baja, se da cuenta de como el monte está agostado. Si  inconscientemente, algún conductor, echa por la ventanilla de su coche, alguna colilla, se abrasa una gran extensión de hectáreas. A veces, alguna boira o niebla impide divisar el horizonte; la depresión hace que la niebla se extienda por el horizonte y no pueda subir a lo alto del cielo. A veces se une a esta niebla la “gallinaza”, que reparte por la tierra algún granjero, -y  el mal “orache” o  ambiente “fosco”, que infunde melancolía. Esa niebla lejana que se divisa, puede deberse a un rastrojo, que está ardiendo, pero a veces está formada por el polvo, que levanta  el ganado, con su paso por aquellas tierras secas. Aquel rebaño está formado por ovejas,  que buscan el agua para beber, como si estuviéramos en el Sahel o en California, como se ve en las películas del Oeste. A veces dice la prensa que son los Monegros, los que hacen caminar a los rebaños, muchos kilómetros, para que puedan beber. Se oye a veces un refrán, que dice: El cierzo y la contribución,  tienen perdido a Aragón. Con estas escasas palabras se definen las desgracias de nuestra Región. El cierzo incrementa la sequía y  los granizos y las tormentas, acompañados de otras calamidades atmosféricas, hacen difícil el cultivo de la tierra. Menos mal que Piedrafita de Velillas, allá arriba frente a Puendeluna, a orillas del río el Gallego, ha colocado unas mallas de plástico sobre los manzanos, para que el pedrisco no dañe sus frutas. La contribución se refiere a los pagos de los regadíos de  aspersión, que se han hecho obligatorios en algunos casos y que son necesarios,  por falta de hombres; se refiere también  a los precios de algunas  maquinarias agrícolas modernas y a las promesas incumplidas, como la ejecución de los regadíos del monte de Siétamo por el Guatizalema. Le pasará al gobierno como a aquel propietario, que por ahorrar, quería acostumbrar a su burro a no comer. Cuando  consiguió convertirlo en un animal penitente,  se murió el burro de hambre. Así le puede pasar al gobierno con sus súbditos, es decir que los ciudadanos, carezcan de alimentos. Cuando se quiera dar cuenta de la necesidad de los alimentos, ya no quedarán agricultores. Los locales de comercio en las ciudades, están siendo comprados por los chinos y ahora dicen que también van a comprar tierra cultivable y así como peseta que entra en sus manos, va a parar a la China, los productos agrícolas que cosechen, irán a parar al Imperio Oriental.
En cierta ocasión escribí este soneto en Fabla Aragonesa, que dice así:
“As rayadas d´o sol as yerbas secan-T’as tierras d’Aragón plegué l’estíu,- Carrascals y patrals,¡to ye sulsíu!.-N’a balsa bueda, as reses esbelecan,-N’a sete omes y animals s`embrecan,- To lo mon ye un disforme otilíu.-¿Cuántos de diyas en fa que no a plevíu?-As reses ni una brenca ya replegan.- O mal orache ye enemigo eterno-d’o labrador, y a chen clama ta o cielo.-Pero a isto s´achunta un mal moderno:-Os oficials se tornan como o chelo-y no comprende a lo Campo , lo gobierno,-Viendrá l’augua?: ¡ ya imos a veyelo!.
Los rayos del sol la hierba secan-A las tierras de Aragón llegó el verano- Carrascas y robles,¡ todo está seco!- En la balsa vacía, las reses braman- Todo el monte es un deforme verano-¿Cuántos días hace que no ha llovido?- Las reses ni una pequeña rama se han comido-el mal tiempo es enemigo eterno - del labrador, y la gente clama al cielo.-Pero a esto se une un mal moderno: los oficinistas se tornan como el hielo- Y no proceden al cambio, los gobiernos-¿Llegará el agua?: ya lo veremos.
Mucha gente pretende resolver los problemas agrarios y se sirven de sus cargos, para subir en su carrera política. Lo peor es que todos opinen del campo, menos los labradores, que ya son casi una casta de viejos.

lunes, 22 de agosto de 2022

La guerra Civil en el Altoaragón. Sábado 10 de Octubre de 1936

 


Siétamo durante la Guerra Civil 1936.

El Señor Duque , el Cura párroco y el Guarda jurado.

“Todos los caminos están cerrados para los fascistas de Huesca. Son tres personajes que prepararon las matanzas de Siétamo. Un entierro interrumpido. El castigo a los traidores. ¿Cómo arreglaré yo una cuenta en el Coso Bajo?. El número de asesinatos ocurridos en la ciudad oscense. Esto es horrible”.

“Este texto es horrible”: ”De nuestro enviado especial en el frente,  Aquiles Vicente”. Mientras  llega la asfixia. Hoy es día de calma. Nos invade esa “tranquilidad relativa” que puede haber en las líneas avanzadas de una zona de guerra,  es la sinfonía  constante donde el “paqueo” es la sinfonía constante que acaricia al luchador. Hoy. Después de conseguida la conquista de Montearagón y Estrecho Quinto, nuestras aguerridas columnas refuerzan las fortificaciones ocupadas , rehacen sus núcleos  y dan un merecido descanso a sus nervios desconcentrados por esa cruenta lucha en que la traición hundió a España. Los rebeldes que se hallan en Huesca tenían su único portillo por donde buscar la  huida y recibir refuerzos para prolongar su angustiosa situación, la carretera hasta JACA; desde hoy no llegara por esa ruta ayuda alguna de los traidores a la Republica………..Ya no hay salvación para los desleales que ven avanzar los días con angustia. Se sabe que empiezan a carecer de municiones; que los víveres, a pesar del severo racionamiento, se agotan por momentos, que el carbón ya desapareció y con él surge el inmediato peligro de quedarse sin fluido eléctrico y posiblemente con las conducciones de agua potable cortadas. No les queda más remedio que sucumbir o entregarse a las fuerzas del gobierno. Cuanto más tiempo tarden en decidirse, peor será. Mientras tanto en Huesca ya no se vive. Un movimiento constante de angustia invade al vecindario, que todos los días por la mañana y por la tarde, y muchas veces de madrugada, tiene que soportar con espasmos de irreversible pánico colectivo terribles bombardeos.“

“No les queda más remedio que sucumbir o entregarse a las fuerzas del gobierno. Cuanto más tiempo tarden en decidirse peor será. Mientras tanto en Huesca no se vive.  Un movimiento constante de angustia invade al vecindario, que todos los días por la mañana y por la tarde tienen que soportar con espasmos de irrefrenable pánico colectivo terribles bombardeos, que unas veces corren a cargo de nuestras escuadrillas de aviones y otras por las baterías de pequeños y grueso calibre , que han pulverizado por completo todos los arrabales de la ciudad y edificios estratégicos del interior del caserío. Como el cementerio está enfilado por nuestros fuegos los enterramientos tienen que hacerlos en los jardines públicos o en los corrales. Faltan verduras, pues, no hay hortelanos que se aventuren a salir a las huertas que están a un tiro de fusil nuestras avanzadas. Este es el panorama trágico y desolador de la Ciudad de Ramiro el Monje, centro principal de la traición fascista en el Alto Aragón. El dilema para los rebeldes es escalofriante; o morir, o entregarse a la generosidad desconocida para su seca sensibilidad de las tropas que luchan por la República y la democracia……….. Mientras recapacitan entre cañonazos y bombas lo que hay que hacer, hemos dado una vuelta por este amplio sector que tan Maravillosamente dirige el coronel Villalba”.

De todo este cruel ambiente estábamos mi padre, mi madre seis hijos y mi abuela y su hermana tía Rosa. Yo recuerdo mi nerviosismo y mi miedo por que una bala de cañón entró en la bodega donde se habían ocultado mi padre y mi pequeño hermano Jesús cuando estábamos refugiados en Huesca.

¡Qué leyendas pregona el Partido Comunista dentro de la Política! ,cuando se ponen a predicar cuando hablan de Siétamo la mártir!. Puede asegurarse que de ochocientos treinta y cuatro edificios de los que constaba el lugar, sólo once se han salvado de ser desmantelados por la metralla. Los restantes están destrozados, ennegrecidos por llamas, sus muros, y hundidos sus techos, bajo los cuales  quedaron muebles y enseres, y en muchas casas enterradas por los escombros, los humildes campesinos a quienes cogió dormidos la barbarie roja y no pudieron huir de la muerte, “ No pudieron huir de la muerte, quedando dormidos los humildes campesinos a quienes cogió dormidos la barbarie roja y no pudieron huir de su cruel muerte”.

“Mi padre del que dicen que era un marques “criminal”, ya no estaba en Siétamo sino viajando a la frontera francesa con su familia”. En primer lugar nos llevó a Jaca, después a Ansó y por último subió a la frontera, donde los carabineros le dijeron que no había que huir a Francia porque ya estaba perdiendo aquella triste guerra, el Mundo Rojo.

Ya se veía surgir un traslado a Huesca desde Siétamo y a escasos días de este nuevo intento de fuga, ya íbamos subidos en un camión hacia Huesca. Al pueblo no se podía volver, porque era una ruina total, obra de los enormes bombardeos que tuvo que sufrir en aquella “repugnante guerra”. A mi madre la colocaron al lado del volante de la camioneta, porque ya estaba sufriendo su corazón. En mi pueblo de Siétamo íbamos con otros niños a buscar por el palacio innumerables “balines” de fusil, que se habían lanzado unos contra otros. Me acuerdo de Rafael Bruis y de Antoñito del Herrero, que unido con ellos, coleccionábamos balines de fusil como si fuera la única “riqueza que había quedado en el solar de mi pueblo natal”. De rodillas por el suelo recogíamos balines y nos fijábamos en la mano del hijo de Eduardo, con un aspecto, con lesiones y falta de dedos, producto de su juego con los residuos de aquella cruel Guerra.

Pero en aquel recorrido de ruinas por el pueblo de Siétamo y de muertes por fusilamientos desde Barbastro hasta Huesca, me vienen a la memoria muchos de esos fusilamientos entre los “rojos” y los blancos. En Barbastro se dio el asesinato desde su Obispo, sus múltiples religiosos en el Monasterio El Pueyo, hasta el convento ,situado en las calles de esa ciudad, del gitano, cuya efigie se venera en lo alto del Convento- monasterio citado anteriormente, en la entrada a esa ciudad mártir de Barbastro. Pero no sólo fueron ellos los mártires asesinados por los “rojos y sus discípulos”, sino multitud de ciudadanos de tan noble Ciudad.                                                                               

Aquel ambiente de violencia hizo que en Huesca se fusilaran unos noventa individuos por algunos ciudadanos de la capital. Cuando se lee una obra del Escritor del premio Nobel George Orwell, parece que este hombre se echa a llorar, al ver la cruel invasión que realizaron los “rojos” en Barbastro.                                                                                            

sábado, 20 de agosto de 2022

Ahora. Frente de Aragón.-

 

           


         

“El guerrillero faccioso (Benete) pretendía incendiar el pueblo que defendía, antes que entregarle a los leales. ( De nuestro enviado especial Antonio de la Villa).La lluvia incesante de estos últimos días no ha menguado en nada los ardores de los bravos milicianos, cada vez más atentos a la misión trascendental que se ha confiado.Este aviso de la lluvia ha servido para que el Comité de Abastos de Cataluña ,¡estad atentos a esta previsión, madrileños!- haya dado hoy por radio, periódicos y hasta por edictos telegráficos, una orden tajante que dice:”Hay que entregar en el plazo improrrogable de veinticuatro horas todas  las prendas impermeables y de abrigo personal que se hallan en almacenes y tiendas para la venta”.

Este demuestra mas que nada como se esta perdiendo el miliciano en Cataluña y en cuanto a comida, basta saber que en el mismo Barbastro los hoteles carecen de pescado, y sin embargo en los comedores de las milicias hay pescadilla y sardinas excelentes, que a diario se reciben para ellos del propio Barcelona. El pan que se coge en todos los frentes de Aragón es del día.A diario se sacrifican vacas y terneras, funcionando con toda precisión una red de serviciales para el aprovechamiento, tan útiles como los que están obligados a manejar el fusil.En Sietamo ha habido que abastecer de todos los elementos. La desgraciada población civil que se ha reintegrado otra vez en la vida ordinaria ha visto arder sus humildes hogares y desaparecer lo poco que tenían. La retaguardia miliciana que elabora con todo ardor ha llegado a Siétamo con mantas, colchonetas, y hasta con útiles de cocina.En Siétamo hay más médicos, pertenecientes a la sección sanitaria de la F.U.C y un equipo completo de odontología para atender a las curas de boca.Los rebeldes antes de abandonar Siétamo –lo tengo ya dicho- rociaron con gasolina el pueblo y prendieron fuego a las casas. Únicamente se ha salvado de la quema la iglesia, -la parte posterior, destruida por nuestros cañones del 7,5- y el Castillo de Aranda, situado en la parte izquierda del pueblo, según se llega de Barbastro.El cura Bonete guerrillero audaz, de raigambre carlista, su padre era el famoso Playán, que peleo el 74 en Navarra al lado de la santa cruz, presidia en Sietamo el llamado comité de defensa. Hombre culto, de decisiva influencia en el pueblo dirigía la política y administraba a los terratenientes mas ricos de Sietamo, no estuvo remiso en empuñar las armas, y provisto de una pistola ametralladora, acompañado siempre del sargento de la Guardia Civil Máximo Barrios, comandante del puesto de Angúes y del capellán de Ola, utilizo como reducto la torre de la Iglesia, haciendo jornadas de 12 y 14 horas todos los días en franco tiroteo contra las fuerzas leales. Por la noche, reunía en la propia iglesia a los mas caracterizados y disponía el racionamiento de comestibles, la distribución de fuerzas en el castillo y en las calles y a los enlaces con Huesca. Se llama a este sacerdote – porque vive y se puso a buen recaudo cuando entraron nuestros soldados en Siétamo- Marcelino Playán. La víspera del 13 de Septiembre –fecha en que fue tomado Siétamo por las fuerzas de milicias, con carabineros, Guardia Nacional- se le vio al cura Benete ir y venir como un fantasma por el pueblo – llevaba tres días sin dormir- nos decía un fascista que espera su enjuiciamiento en Barbastro, pálido, casi cadavérico, con los ojos desorbitados y echando venablos por la boca  cosa que no le habíamos oído nunca, llegamos a temer que se volviese loco. Aquella noche, víspera de la rendición y huida del padre Bonete se reunió con el juez municipal, con el Alcalde de los Valles, con el sargento De Angúes y con su compañero el capellán “Estamos –dijo- cercados y sin medios de defensa. Aquí en Siétamo hubo hombre que en otra guerra supieron resistir mas de un año. Eran siete, y tenían un frente enemigo de más de 5000. Nosotros hemos sido muchos más pero con menos espíritu. No tenemos valor ni para matarnos uno a uno. Pero Siétamo que es nuestro y sirvió siempre la causa del orden y de la realeza, debe desaparecer incendiado. Sus cenizas se aventarán y es posible que sirvan de semilla purificadora, que den alientos a los que por nuestra causa pelean. “Bonete” cumplió el ofrecimiento. Siétamo fue quemado pereciendo muchas infieles criaturas, bien ajenas a la criminal maquinación. Y en el pórtico de la Iglesia, sobre la madera, pinto una cruz blanca, puso una enseña bicolor y debajo un letrero que decía: “La guerra sigue”. Barbastro Septiembre de 1936”.

                                            Guerra en Ucrania.

Tendencia de España a la Europeización:

Este texto anterior me lo dio en el pueblo de Siétamo un individuo del que no me acuerdo de su nombre, que habiendo pasado los años de la Guerra Civil, quiso exponerme una parte de los sucesos, procedentes de la influencia de Moscú en Barbastro y en la lucha casi dentro de Huesca. Yo ya no me acuerdo de su nombre, pero si recuerdo la emoción que le “pesaba” en su memoria. Entre otros sucesos que pasaron en la salvaje destrucción de Siétamo, recuerdo como un General ruso,que bajaba en un  automóvil por el Estrecho Quinto, murió por los disparos que recibió en tal carretera que baja dese el Somontano a Huesca. 

Esta muerte del General Ruso, me impresionó,  pero ya me dio a entender la labor conquistadora por parte de Rusia de la Tierra de Aragón.Era una parte positiva del general ruso en la labor comunista para conquistar Aragón. Pero no solo fue este general el único jefe de la guerra civil en Siétamo en la carretera de Siétamo a Huesca, por que en Siétamo en casa Almudévar estableció Durruti la Jefatura de la 26.ª División (Ejército Popular de la República). Está Divisón significa su propia división con el Ejercito Español. En una revista de la Guerra Civil, sale un artículo en que cuando los milicianos estaban tratando de conquistar Siétamo, una Compañía de soldados gubernamentales, estaban sentados tomando el sol, en las orillas del río Guatizalema, Pasó por su lado un comisario y les abroncó por no luchar por la conquista del pueblo de Siétamo. Eran dos cuerpos, uno militar y otro revolucionario y no se entendían.  La Guerra Civil en España, atrajo la atención del Mundo, de tal manera que Ernest Hemingwuay, escribió “Por quien doblan las campanas”, que manifiesta el impacto internacional de la Cruel Guerra Civil en España”

Fumar o no fumar

  Bajaba cierto día por las escaleras amplias de un edificio oficial y al llegar a uno de los vestíbulos de cualquiera de sus pisos, desde l...