domingo, 1 de agosto de 2021

Contraste entre el hombre superior y la mujer abandonada por el Mundo.-

 


                     

Cuando vivía por el Coso Alto al lado de la iglesia de Santa Ana, yo tendría una edad de unos diez a doce años y me veía rodeado por ese templo y escuchaba los sonidos litúrgicos de aquellas monjas. Por la parte trasera de aquel Colegio, se observaban las ventanas de las aulas de enseñanza a las alumnas. Y entre el recreo de sus alumnas y el jardín donde mi tía Rosa cuidaba las flores del jardín, ascendía un gigantesco rosal de diminutas rosas. En la alcoba  donde dormía, escuchaba la música mística de la iglesia del convento- colegio de Santa Ana.

Pero a la felicidad por un lado y un malestar material y moral que el Señor presidía por el Mundo, llegó una Guerra Civil. Mi pueblo, Siétamo, fue destruido y los recuerdos de mi primera infancia, me animaron a través del tiempo a volver a él, para reconstruirlo.

En aquel escaso tiempo que viví en el Coso Alto, al lado de Santa Ana, gocé de la vida, apoyado por mi madre y por mi padre. Contemplé, hasta que huimos a Jaca, el Teatro Olimpia, con su bombardeo, pasé por delante del Actual edificio de estilo aragonés, hoy Caja de Ahorros y desde una reja, un prisionero político me pidió que le diera  un  bocadillo y yo le di el que yo tenía entre mis manos. En el Teatro Principal asistimos a orar por un joven, muerto por los bombardeos de la ciudad de Huesca.

Mi madre me mandó llevar un encargo a la tienda, llamada de los  Alemanes, frente a la Plaza del Teatro, en que vencí el miedo que me producía resolver problemas de convivencia.

En el Teatro Principal, el Canónigo Don José Puzo, al mismo tiempo que enseñaba la Doctrina Cristiana, alimentaba a muchos niños sus cuerpos.

Yo cambiaba cada día mi persona con la vida y me impresionó una película de cine, que representaron en el Teatro Principal, fue tal su impresión, que volví a presenciarla.

¿Qué ambiente de la vida producía su programa, de las distintas clases de vida , que se daban en la misma?. Porque en ella se destacaba la personalidad del Noble alemán o ruso, que vivía el sólo, en un ambiente de nobleza, que le preocupaba y que cada día recorría toda su residencia, tal vez antiguo Palacio de Poder, perdido en la Unión Soviética. No sabía si aquel poder se había perdido en aquella soledad rusa pero él, cada día, vigilaba acompañado de esa triste soledad, y abría las puertas de aquellas habitaciones, las miraba  en su interior y seguía su solitario vigilar su noble Mansión.

Aunque recorría sólo las enormes habitaciones del Palacio, no podía disimular la preocupación, abriendo cada puerta, que le producía la ausencia de la jovencita de todas las habitaciones de su gran Palacio. ¿Cómo soportaría la ausencia de esa bella mujer, que él deseaba que fuera madre de la continuación de la vida de su estirpe en tan noble Palacio?.

 En aquella época en que yo tenía alrededor de unos siete años, era tímido y no quería ofender a mi madre, porque me apuraba el recibir un trato humillante de personas ajenas a mi familia, como los alemanes del comercio de los Alemanes, frente a la Plaza del Teatro. Y en  aquella  época ausente de mi pueblo de Siétamo, estaba en Huesca, que ya era atacada por las tropas marxistas, que habían destruido Siétamo. En Huesca en el piso inferior al de mi abuela, estaba mi padre cuidando a mi hermano pequeño Jesús, un pedazo de bala, tal vez, algún pequeño trozo de metralla, le dio en el pie.  En frente de casa cayó bombardeada su clásica fachada del Cine Olimpia. Marchamos de Huesca hasta Jaca y Ansó, para pasar a Francia si fuera necesario y parece ser que antes de acabar la Guerra  informados por los medios de información, volvimos a Huesca, cuando todavía no había terminado la Guerra Civil. Entonces volví al Teatro Principal donde se cuidaba de los niños en su espíritu y en alimentación. En dicho Teatro me sorprendió la representación de una película MUDA, en que se veían escenas mudas, pero que penetraban en mi espíritu. Me impresionó de tal forma que volví a contemplar la película otra vez. Ignoro de donde saqué el dinero para ver de nuevo la misma película.

Yo nunca supe quienes eran los dos protagonistas de la Película, uno un gran señor y una joven y bella muchacha judía.

Hoy mi nieto Pablo me ha preguntado por esa película y yo no me he acordado de la situación de sus personajes. Pablo se ha puesto a investigar las películas de aquellos años tenebrosos y ha encontrado el argumento de estas dos personas, a saber una rusa y otra judía europea. ¿Buscaba el señor ruso, huido de su patria dar un nuevo matrimonio en su casa-palacio o quería casarla con algún ruso más joven?. No se sabe nada del final de la huida de su Palacio, porque tenía miedo a ser maltratada por una nueva vida, ¿en que se hubiera sido casada por el gran señor ruso?

Poco le sirvió este temor al porvenir , pero al ser judía, tal vez le quedaba asegurada la muerte por su condición judía.

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