Paco Solano

El señor don José Porta Callén fue el creador con Paco Solano del Pantano de Montearagón, pues viajaron a Madrid para conseguir su construcción. Intervino  en la misma construcción del Pantano la  Geóloga Ana Castillo, nacida en Coscullano y ella me llevó pasando por el Puente sobre el Flumen  a ver la creación del Pantano de Montearagón. Paco Solano vivió la solución de la construcción del Pantano del río Flumen, acompañando a Don José Porta Callén a Madrid, para pedir al Ministro de Agricultura, que se levantara una presa, para guardar el agua del río Flumen y regar lo que se pudiera de pueblos como Bellestar de Flumen y otros.  Yo con origen del pueblo de Barluenga, por donde se pasa desde Siétamo al Pantano, ponía un interés por ser vecino de la obra y algunas veces, cuando iba a Huesca desde Siétamo, iba por Barluenga para bajar a Huesca por el pueblo de Fornillos de Apiés y por el Depósito de Basuras de Huesca, por la carretera de Apiés. Me gustaba contemplar como iba subiendo el agua que se iba, poco a poco deteniendo su paso por el anterior antiguo cauce del río, hoy convertido en depósito de las aguas del río.

Le conté a Paco Solano mis viajes por la ruta de Barluenga y él, emocionado me contó el interés qué con Don José Porta, tuvo por repartir el agua en las granjas que tenía en Loporzano, desde aquel río Flumen y en su zona, para que llegara a todas las granjas situadas en el Monte de Loporzano. Al mismo tiempo Paco Solano soñaba en la riqueza de la zona central de la provincia de Huesca.

Pero no soñaba solamente en la riqueza de Huesca, sino que desde niño ya tenía devoción con su alegría en el triunfo deportivo del equipo oscense, al que nunca han dejado de ser socios “ni él ni sus cinco hijos y la decena de nietos que le han rodeado”. Decía: ”deseo que le vayan bien las cosas al Huesca. Yo siempre seré del mismo”.

Pero no sólo ha vivido en la ciudad de Huesca, y ha trabajado por ella en su vida deportiva, sino que ha hecho la misión de crear el Pantano de Montearagón, siempre en unión con don José Porta.

Es un milagro la creación de este Pantano y aunque se dan en él escapes de agua, después de muchos años de su construcción, se siguen cerrando escapes de agua del mismo.

Han sido varios los trabajos que en su vida emprendió Paco Solano, pero yo soy testigo de los ratos que pasé en su huerto al Norte de Huesca, donde viví unos ratos de alegría y descanso de mi espíritu. Nos sentábamos en un banco contemplando el verde de aquellos huertos y jardines y cuando entrábamos en la pequeña nave, donde cientos de canarios  cantaban y gozaban de aquellos conciertos de vida musical, en medio de una vida natural, completamente pacífica. Allí  acudían  sus hijos y alimentaban a los canarios en medio de la paz del retiro de las avecillas.

¿Paz que ahora seguirás tú, gozando de una vida  celeste!.