El Romance de la Marichuana, a
pesar de que la fabla aragonesa, casi desapareció del Sur de Aragón, tiene una
historia tradicional en los Monegros y en el Sur de los mismos, en la provincia
de Zaragoza. En los Monegros, lo hizo popular “el cantor de la gaita”, que fue
hijo y nieto de gaiteros, Simeón Serrate (1.913- 2.011), que vivían en Castejón
de Monegros. Fue hijo y nieto de gaiteros, mayoral y cantor de canciones
despertadoras, romances y pasacalles. Al romance de Marichuana se le conoce con
el nombre de “el romance del Montañés”,
porque Simeón era pastor y lo aprendió del “tío Puyuelo”,que era un pastor de
su familia. Se daba en aquellos sencillos músicos un intercambio de cantabajos,
músicas y cuentos entre los pastores, que desde la Montaña bajaban todos los
inviernos con sus ganados a los pastos de los Monegros, Algunos acababan
quedándose a vivir en la Tierra Baja. Hasta mis parientes de Bandaliés, tenían
buenos pastos para el invierno, en las orillas del Ebro.
Esta tradición oral se conserva
cantando en lengua aragonesa y se oyen combinaciones de voz y coro y gaita en
Castejón de Monegros. También se escucha a veces como alguien canta el Romance
de Marichuana.
Pero no sólo he oído cantar este
romance de Marichuana en los Monegros, sino qué en todo Aragón, se han
escuchado cantados por sus vecinos, romances de Marichuana. Yo escuché cantar
en Siétamo a mi padre, que nació en 1.885 y estudió primeramente en el Colegio del Coso Alto, número de 38, en que aparece
mi padre acompañado por treinta y siete compañeros, guapos y elegantes, de los
que al único que conozco es a Manuel Almudévar Casaus. Mi padre tenía una
guitarra y acompañaba los cantos de Los Altos Perineos, cuando le gustaba,
lanzarlos al aire.
El lugar en que aparece el grupo escolar
fotográfico, parece ser un enorme
jardín, poco más o menos por detrás de la
casa de Pié, fundador del cine Olimpia, que sigue por Casa de Mingarro, lugares
donde en tiempos pasados se asentaban los jardines del sabio Lastanosa. Aquel
Palacio estaba lleno de Historia y de Arte de tiempos pasados y poseía además
el Castillo, que fue del gran ganadero
Madurga.
MMi padre era sobrino de la
Señora de Carderera y en su lujoso Palacio estaba alojado por su tía, qué con
sus ropas lujosas, le daba para merendar a mi padre una tajada de pan con una
porción de chocolate. Yo estuve muchos años después de la acogida a mi persona
en Casa Carderera, a visitar a la tía que pasaba el verano en Huesca. Era una
señora vestida con ropajes lujosos y de una longitud de sus faldas hasta el
suelo, que recibía a mi tía Luisa acompañada por un niño que después de la
Guerra Civil, entraba en Casa de Carderera, con su tía a visitar a la Gran Dama, mi tía la Señora de
Carderera. Yo no hablaba ni una palabra delante de mí lujosa tía Luisa, porque era la más espléndida en el reparto de meriendas a sus sobrinos. En
la Torre de Casaus vivió con su hermano José María y allí nos daba de merendar
alrededor de la piscina.
MI padre
iba a una escuela privada, que debía estar por esa parte del Coso Alto, donde
ahora se eleva la casa de Pié, que por la entrada a los vehículos se accedía al
Parque Municipal. Yo no puedo recordar ese Colegio del que sólo me queda una
fotografía de los años de 1.900, en la que están fotografiados unos treinta y
ocho muchachos, presididos por un elegante profesor. Esa foto representa al profesor y a los alumnos de esa Escuela o
Colegio de pago, pero al único que conozco es a mi padre Manuel Almudévar
Casaus. Me gustaría conocer por su nombre a todos ellos, pero estoy tan sólo yo
mismo, como mi padre en esa fotografía. Esta Escuela o Colegio estaba algo más
abajo que el Palacio o Casa de los Carderera, donde estaba acogido mi padre.
Aquel ambiente le resultaba un tanto frío y
por esa circunstancia, el Curso siguiente lo hizo en Jaca, donde tenía sus
parientes de la familia Ripa, uno casado con una Casaus, hermana de su madre que era nacida en el pueblo de Botaya,
al lado del Monasterio de San Juan de la Peña.
Pero mi padre jamás perdió la
Fabla Aragonesa, que como he dicho se hablaba hasta Zaragoza y durante la
Guerra Civil en Jaca, recordó su Fabla. Al volver a Huesca, cuando la Guerra
Civil ya se estaba acabando, nos escribió a su esposa Victoria y a sus seis
hijos e hijas un romance al Nacimiento de Jesús
en nuestra hermosa lengua
aragonesa. Ya existía una tradición de los Villancicos aragoneses, cuya letra
encanta a los niños. Algunos piensan que este villancico procede de Holanda,
pero viene de la estrella Olanda, a la que siguieron los Reyes Magos hasta el
Portal de Belén. Es interesante el libro “¡Danzas de Jaca!, que cuenta la
Historia de los dances de Jaca, escrito por Manuel Turón y Fernández.
Mi padre Manuel Almudévar Casaus
era un enamorado de los escritos en aragonés, que nos leyó en la cena familiar
de Navidad la ilustre locutora Joséfina
Lanuza, que cada año nos pronuncia este relato Navideño popular en la iglesia de
San Miguel de Huesca.
Con estos recuerdos de la música
que tanto escuchó en Jaca y en Sur de la Provincia, la noche Buena del año
1.941, nos pronunció el Cuento de Navidad que el mismo había escrito, en 1.941 y
que ese año nos leyó en la Cena de Noche Buena, que fue un canto recordando el
Romance de Marichuana, en Fabla Aragonesa.
Mi padre, entusiasta de la Lengua
Aragonesa, aquella Noche Buena, antes de comenzar la cena y en presencia de su
amada esposa, de sus seis hijos e hijas y de doña Agustina, madre de la
nuestra, llamada Victoria nos pronunció su relato de la Natividad de Jesús.
Comenzó diciendo: “Los pastores del abuelo, narraban bellas leyendas, y hoy
Noche de Navidad, os referiré una de ellas. Era por derecho y costumbre, el
sitio del Mayoral, un puesto junto a la lumbre, a la entrada del hogar. Y desde
allí, con decires de cadencias ancestrales nos narraba efemérides y cuentos de
Navidades.
Quiero emplear el lenguaje que el
Mayoral empleaba, en recuerdo y homenaje a la tradición pasada. Dejemos pues
que se oiga, en esta noche su voz, para narrar las leyendas que en otros
tiempos narró……….Un angélico de Dios- Con os güellos como soles,-Les avisó a
ros pastores,-Qu’abía puos alredoles:-Y ascape fueron llegando-Repatanes y
mairales,-Craberizos, vaciveros,- Yeguas,erizos y duleros,-Boyateros y zagales-
Mocetas d´ixas que cudian-Os pavetes y os verracos-Y mientras filan
estambre,-Apagientan os rezagos._Todos veneban contentos-Y todos trayeban
algo,-Pa ofrecelené a Jesús- Y a o mesmo tiempo adoralo.- Trayeban figos de
Fraga,-Orejones d’Estadilla- Y pansas d´ixas qu´escaldan-En Lascellas y
Velillas,_Vino de Castilsabás- Y corderetes d’Albero-Billotas de Banastás-Y
conejos de Pebredo-Tortas d’aceite d`Ayerbe- Turrón guirlache de Jaca,-Castañas
de mazapán-D’a zucrería Lasala.- Tostadas de Berbegal- y pan moreno
d’Angüés.Pedos d’as monjas de Casbas,-Juguetes de Bandaliés,´- Entre gente tan
humilde-Tan humilde como güena,-Quiso o Redentor do Mundo-Presonase aquí , en a
tierra-Era pa danos ejemplo- Que toda ra vida dio-D´humildad y de pacencia,-De
mansedumbre y amor…………Y aquí remata o relato- Venida del HOMBRE-DIOS.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario