viernes, 7 de julio de 2023

Mi estancia en Logroño, para estudiar el Título de Diplomado en Sanidad

 



Llego a Logroño y ¡caray!, me encuentro con que no tengo nada que hacer y me convierto en una especie de perro callejero que no sabe donde va. El va y viene y algo hace, por lo menos le queda el consuelo de mear de árbol en árbol y yo ¡qué quisiera ser como los animales! Lo que hago es desmear mosto, que también es amarillo, no de árbol en árbol, sino de barra en barra. No se donde duerme el perro vagabundo; yo más afortunado que él, que no tiene cuenta de crédito, decido ir a dormir al Gran Hotel. Saco mi carnet de identidad y relleno la tarjeta de recepción, cosa que no tiene que hacer el can noctívago, que en esta circunstancia es más afortunado que yo. Subo las señoriales escaleras con mi pequeño maletín y atravieso el largo pasillo, pisando el viejo parquet, que cruje lastimero bajo mi peso. El quejido de la madera me pone melancólico y trato de evocar el eco de las risas de las señoritas que en tiempos pasados, que no volverán, poblaban las habitaciones de este viejo hotel. Entonces alguno con sus largos vestidos que cubrían hasta sus botines de tacón acordonados, con sus elegantes pamelas que cubrían sus cabezas.



Ante aquel contraste de pasados lujos de ecos, de risas lejanas y actuales crujidos de maderas viejas , medite un momento: ¡ que vida tan puta!. Al día siguiente me encontré dos mozos,que estudiaban conmigo y fui asu pensión. Allí son las risas actuales y caen los minutos en medio de apuestas, quinielas de fútbol, de toros, de sueldos, de cine,teatro, de viajes, de libros. También los jóvenes tienen penas y desilusiones y algún desencnato, pero los superan y sueñan y cantan y “trucándolo” todo en risas actuales,, de suecas en playas canarias, que no usan pamelas, botones ni batas; un simple “bikini”, que no huele a rancio como en el Hotel,tal vez un poquito a cremas solares, anibióticos y hasta antisépticos..

Ante aquel contraste de soles canarios y brumas nórdicas, de pensiones viles y rancios hoteles, medité un momento: ¡ yo me quedo en casa!.Juventud el alba de oro es tuya, ¡Juventud, juventud el alba de oro es tuya, Aleluya, aleluya¡.

 


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